Capítulo 1

1026 Words
Diez años atrás * (Edad de Jayden: 16) Jayden * - Mamá papá. Soy gay. - Revele después de tanto tiempo de haberlo guardado para mí. No escuché respuesta de su parte, solo se quedará callados mirándome. Bueno, solo fueron unos segundos cuando papá se perdió de golpe estrellando su puño contra mi rostro. - Yo tuve un hombre, no una mujercita. - Gritó molesto. Iba a dejarse ir sobre mí, de no haber sido porque mamá lo detuvo, solo me quedo bajar la cabeza sin tener argumentos, una parte las palabras no pasan, tengo un gran nudo en la garganta. - Ya basta hombre ... - Cállate, por tu culpa es así ... Voy a convertirlo en un hombre. - Dijo molesto empujando a mi madre. Me levanté rápido para ayudarla lo cual fue mala idea, lo enfadó más. De un momento a otro estaba en el suelo recibiendo una gran golpiza de su parte. Se puede y dejó de golpearme a lo que se quedó mirándome un momento. - Si no aprendes a hacerte hombre tendré que obligarte. -— Advirtió con seriedad. Me quedé callado y espere a que se marchará a la cantina como normalmente lo hace en sus estúpidos días de paga. Mamá se acercó a mí y me ayudó a levantarme, me llevó al sofá y me envió en él. - Cariño, no debes decir bromas de ese nivel. - Susurró sin mirarme. Me quedé callado y me levanté como pude, intenté detenerme pero no lo hice, no voy a quedarme en un lugar como este, uno donde no apoyan en nada lo que de verdad soy. Salí de la casa mientras mi madre me grita que volvería una y otra vez. - Si te largas, olvidaré que tengo un hijo. - Gritó la voz de mi padre. Me quedé sorprendido al saber que regresó tan pronto, tragué el nudo que tengo en la garganta y seguí caminando. Creo que tendrás que olvidar que soy su hijo. Estuve caminando por bastante tiempo, no sé cuánto con exactitud, solo que ya es tarde y lo único que me acompaña es la luz de la luna. "Inteligente, buen alumno, de buen carácter ... Seguro llegarás lejos". Esas eran las palabras que mi profesora me confirmó cada vez que pasaba uno de sus exámenes con una nota excelente, pero ahora solo miren como terminé. Llegue a una de las bancas de un parque y me senté, sin poder evitarlo, una mueca de dolor se asomó en mi rostro, se ha pasado. Me quedé ahí un momento, descansando, no puedo creer que haya llegado tan lejos, posiblemente caminé de dos a tres horas. - ¿Te encuentras bien? - Preguntó un hombre mayor. Solo asentí y decidí esperar a que se marchará, pero en lugar de eso se acercó a mí haciendo que me sorprenda un poco. - ¿Cómo vas a estar bien muchacho ?, mírate. - Dijo molesto colocándose frente a mí. Solté un suspiro e intente levantarme para marcharme, no lo conozco, quizás sea alguien malo. Iba a resbalar pero me ayudó a mantenerme en pie, negó por ello y comenzó a caminar llevándome a quien sabe dónde. He pasado por muchas cosas hoy, tal vez él acabé conmigo no sea tan tan malo. Llegamos a una estética a lo que fruncí el ceño, el señor abrió la puerta y nos adentró a ambos, me hizo tomar asiento en el sofá de espera mientras él iba a quién sabe dónde. Solo le tomamos unos minutos cuando volví a mostrándome un botiquín, no dije nada y comenzó a curarme. No pronunció palabras, me siento extraño pero a la vez bien, me ayuda a imaginar que aún hay personas buenas en el mundo. Al terminar soltó un suspiro y recogió todo. - Bueno muchacho, debes tener más cuidado, tus padres deben estar preocupados. Los llamaré. - Avisó tomando el teléfono. Reí un poco por eso haciendo que baje el teléfono y la sobrina. - Mi padre fue quien golpeó y mi madre no hizo nada más que llorar en un rincón. - Avise mirándolo de manera sombría. Se acercó a mí y me abrazó haciendo que me sorprenda. - Es difícil, no siempre acepta lo que uno es ... Puedes quedarte aquí. - Indicó serio separándose de mí. Lo miré sin comprender a qué se refiere pero asentí. Me dio un lugar para dormir y me avisó de qué abría su local temprano, lo que pude ayudar si desea tener esa habitación, no tuve problemas a lo que acepté. ... A la mañana siguiente * Me desperté temprano y me limpié el rostros, acomode mi cabello y ropa. Tome unos utensilios de limpieza y comience a limpiar el local. Una chica entró a lo que le indicó dónde sentarse. El hombre que por cierto no me ha dicho su nombre apareció preguntando que clase de peinado desea. - Solo las puntas. - Contestó sonriendo. Me quedé mirándola y negué acercándome. - Tu rostro es fino y lindo, resaltaría de una manera preciosa si deja tu cabello corto, hasta el hombro. Tus cejas no están muy perfiladas, posiblemente le darían un toque a tus rostros si lo hicieras. - Murmuré tomando su rostro con mis manos. Los dos se me quedarán mirando a lo que me sonroje e iba a seguir con lo mío pero ella me perderá el brazo. - Por favor podrías indicarle que hacer, confío en ti. - Dijo segura. Asentí y miré al señor quién también me sonríe. Estuve indicándome donde cortar, así mismo yo me encargue de perfilar sus cejas. Al terminar la giramos dejando que se miré. Sonrió satisfecha y se sintió de golpe abrazándome. - Eres increíble, recomendaré a mis amigas este lugar. - Dijo emocionada sacando el dinero. Me entregó el dinero a mí y salió de manera rápida mientras llama por teléfono. - Vaya ... Dime muchacho: ¿Quieres ser estilista? - Pregunto sonriendo. Sonreí con emoción de solo pensar que yo puedo hacer que las mujeres sean hermosas, me agrandan, ya que yo quiero serlo, aunque también me agrada ser humano, no me siento mal con mi cuerpo ... ...   Comencé a trabajar con él, las clientas nos llenaron el lugar, de un momento a otro comenzamos a crecer, el local pasó a ser de ambos, colocamos varios, hasta que él murió y me dejó solo una vez más ... Hola chicas y chicos. Espero que les guste. Gracias por leer. Voten y comenten. ❤️
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD