bc

No hace falta la luna llena

book_age16+
1.1K
FOLLOW
3.5K
READ
alpha
goodgirl
independent
brave
confident
luna
drama
comedy
highschool
Fantasy Romance Ⅱ Writing Contest
like
intro-logo
Blurb

El primer día del último año de la secundaria llega un estudiante nuevo, lo cual le parece extraño a Lía Taylor porque muy poca gente se muda a su pequeño pueblo y lo usual es porque tienen familia, pero no conocía y jamás había visto a Caiden Preston. Cuando Caiden la ve a ella, esos ojos, esos ojos los conoce pero no recuerda de donde o quién exactamente.

Ella es su mate pero no lo sabe, ni siquiera sabe que existen los hombres lobo. Si le dice, ¿le creerá? ¿Se arriesgará?

***

Esta es la primera historia que voy a escribir sobre lobos y cosas fantásticas, espero que lo disfruten y me dejen sus opiniones. Gracias por leer!

chap-preview
Free preview
Capítulo 1
   Genial, empezaron las vacaciones de verano, son mis últimas vacaciones de verano antes de que me vaya a la universidad, las últimas dentro de la secundaria, y la primera vez que voy a trabajar. - ¡Lía! - escucho que me llama mi mamá desde la cocina. - Voy - le grito. - ¡Lía vení a desayunar! - ¡Ya voy! - le grito mientras termino de levantarme. - ¡Lía Taylor! - ¡Que ya voy mamá! - le grito por última vez antes de salir por la puerta de mi dormitorio y al llegar me mira en forma de desaprobación. - ¿Qué? Tres veces te dije ya voy y no escuchabas. - Si escuchaba, pero quería que vengas. No quiero que llegues tarde a tu primer día de trabajo - me sonríe y la miro con odio, con mucho odio. - Faltan 3 horas, faltan 3 santas horas para que vaya a trabajar madre. - No me digas así, ahora come - me dice poniéndome un té junto a un plato de tostadas y mermeladas para ponerle por encima. - Gracias mami.    Termino de desayunar y me voy a bañar, me doy un relajante baño de espuma siendo la primera vez que lo hago. Quiero empezar bien mi primer día de trabajo, es en una librería por lo cual estoy más emocionada que nunca. Amo leer, amo los libros, amo a los escritores, amo todo lo que tenga que ver con el mundo de la lectura.     Mientras me baño me recuerdo quién soy, es un ejercicio que uso para mi confianza, no es que tenga problemas con eso pero una vez leí que servía.    Me llamo Lía Taylor y tengo 17 años, vivo en un pueblo de poca cantidad de personas pero tenemos relativamente cerca una ciudad a la que vamos por cosas que no hay acá, o simplemente a pasear. Mi papá, Peter, es policía y cuando yo tenía 12 años hice un curso de tiro de pistola defensivo, siempre me ha enseñado a defenderme para cuando él no esté en la situación. También he ido a clases de karate pero la verdad es que me aburrían, y casi siempre volvía a casa con más y más moretones. Mi mamá, María, por su parte, es médica general y trabaja acá dentro del pueblo, pero una vez a la semana tiene que hacer guardia en el hospital de la ciudad. - Lía apurate que vas a llegar tarde - escucho que me dice mamá golpeando desde el otro lado de la puerta y al ver el celular me doy cuenta de que estuve más de una hora, no me había dado cuenta porque cada tanto me volvía a poner agua caliente entonces se mantenía, mala elección hacer eso al parecer.    Me cambio lo más rápido que puedo y me doy cuenta que aun faltan unos minutos asique planeo ya salir para ir caminando tranquila, nada queda demasiado lejos acá aunque las casas no están todas juntas como en la ciudad, sino que cada una tiene grandes patios y tenemos un bosque al otro lado. - Acá te hice el almuerzo mi chiquita. - Gracias ma - le agradezco mientras le agarro el tupper y lo guardo en la mochila. - ¿Papá está trabajando? - ella asiente. - ¿Por qué preguntas? - Por si me podía ir a buscar. - No te va a pasar nada hija - me da un beso y se va.     Salgo caminando directo a mi primer día de trabajo, me siento emocionada aunque ya me han dicho que la emoción se me va a ir en cuestión de días, tarde o temprano se va. La razón por la cual quería que mi papá me vaya a buscar, es porque como dije antes, tenemos un bosque y suele haber osos. Hace mucho que un oso no se acerca demasiado a nosotros, pero igualmente me da miedo desde que una vez a los 6 años uno se me acercó demasiado y me gruñía, y mi papá junto a un vecino lo tuvieron que matar. Eso me traumó un poco, pero supongo que es lo normal de vivir acá. - Pero si ahí llegó mi empleada favorita - escucho que me dice la señora Anderson, dueña de la librería. - Soy tu única empleada - le sonrío mientras acomodo mi mochila. - Lo sé, por eso sos mi favorita - me da un beso y sigue su camino. - Hoy te voy a pedir que ordenes, por favor, por autor todos los libros. Y si podés de cada autor, ordenar sus libros alfabéticamente pero si se te complica mucho, hacé primero una cosa y después la otra. - Sí, no hay problema, hago todo de una. - Sos una genia, yo ahora me voy a ir asique acá te dejo una copia de las llaves para que cierres. Todos los días voy a abrir yo y vos cerras, ¿sí? - Sí, perfecto. Gracias señora Anderson. - Decime Sara que me hacés sentir vieja, y gracias a vos porque ya no puedo seguir atendiendo yo con mi edad y necesitaba a alguien justamente como vos - le sonrío y ella se va.    Muy bien, manos a la obra. Me encanta que me confíe así la tienda, a pesar de ser mi primer día, aunque en realidad todos nos conocemos entre todos, y ella me conoce desde que estoy en la panza de mi mamá.  - ¡Hola! - entra gritando mi amiga Betiana mientras que yo estaba comiendo. - Hola amiga, ¿qué haces acá?  - Vine a hacerte tu primera compra. - ¿Cómo sabés que no vendí algo ya? - nos quedamos mirando un rato hasta que reímos las dos a más no poder. - Porque vivimos acá. Bueno, quiero leerme uno de Shakespeare - yo la miro con una ceja alzada. - Mamá me dijo que me hacía falta leer asique le pregunté que libro y me dijo que compre uno de él. También me dijo que si no volvía con el libro, volviese con la plata y sabes que no puedo tener plata y no comprarme ropa, está en mi ADN de alguna forma - río y hago que me siga. - Justo recién ordené los de él, podrías elegir Hamlet. - Entonces Hamlet será - la llevo de vuelta al mostrador y le cobro. - Te voy a dejar en este encierro. - Y por eso te amo - reímos y se va.    Y así pasa la tarde, mientras ordeno los libros como me dijo la señora Anderson, va cayendo la noche. Alrededor de las 8 de la noche, empiezo a terminar de acomodar las cosas para irme. Agarro una hoja y una lapicera que veo arriba del recibidor y le escribo una nota. Señora Anderson:    Mañana termino de ordenar las cosas como me dijo, hice mas o menos la mitad asique mañana seguiré. Con cariño, Lía      Cierro todo y empiezo a caminar hacia mi casa. No está dividido bien en cuadras esta parte pero si las imagino así, serían unas 30 cuadras mas o menos. Ya a esta hora está todo cerrado, y respecto a la seguridad hablando de personas, acá no hay inseguridad a no ser que venga alguien de otra ciudad, nos cuidamos entre todos.    Ya pasadas un par de mis supuestas cuadras, escucho pasos como de patitas, tal vez alguno de los perros de mis vecinos se escapó asique me doy la vuelta pero me arrepiento enseguida. Parado a aproximadamente 1 metro de mí, hay un lobo.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

El Alpha

read
195.9K
bc

Nirella

read
1.0M
bc

Una vez rechazada, dos veces deseada

read
278.5K
bc

Only Mine

read
10.7K
bc

Mi vida como la esposa del duque

read
582.2K
bc

Tras tus Huellas

read
35.6K
bc

La Mirada de Jade

read
89.4K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook