RADIACTIVA

CAPÍTULO 2

Sola

Poco a poco abrí los ojos, siento como si no hubiera pasado mucho tiempo, puedo ver que  aún estoy en la camioneta, la cual está volcada, los cristales rotos y los metales retorcidos me dicen que fue un gran accidente. Mientras trato de reaccionar completamente, el dolor me ayuda a despertar, empiezo a sentir el agudo dolor en mi hombro, ahora la pieza metálica está más enterrada, con cuidado me arrastro sobre los vidrios rotos hacia afuera, salgo por una ventana y me detengo un momento para calmar el dolor, recostada mirando al cielo me doy cuenta de que hay pocos rayos de luz, no sé si apenas está amaneciendo o está por anochecer de nuevo. La verdad no recuerdo mucho, solo recuerdo que salí con mi familia y… ¡mi familia!

Con mucha dificultad logro ponerme de pie, pero al levantarme un dolor en mi pierna izquierda me hace tambalear, debí haberme lesionado en el accidente, me siento fatal. Empiezo a caminar lentamente para no lastimarme aún más, debo buscarlos, pero un hormigueo que me recorre de pies a cabeza casi no me deja avanzar, no tengo más opción que quedarme quieta por la sensación tan incómoda, me quede solo observando a mí alrededor, y me doy cuenta que estoy en el fondo de un barranco, no es muy profundo, quizá es tan alto como una casa de dos pisos, no está muy inclinado así que podre escalar y salir de aquí, aunque será difícil ya que apenas puedo mantenerme de pie, pero no puedo quedarme, tengo que buscar a mis padres, aquí abajo no hay rastro de ellos, si hubieran muerto sus cuerpos estarían aquí, pero no están, seguramente están arriba.

Lentamente empiezo a subir, tengo que hacerlo casi arrastrándome porque es difícil de pie, pues no puedo mantenerme mucho, al llegar arriba veo un par de autos que también chocaron, en ellos si hay c*******s llenos de sangre, hay tres personas muertas, y… un zombie.

¡Ya recordé!, un auto nos chocó y por eso caímos al barranco, ahora recuerdo todo, tratábamos de ir a un lugar seguro, y escapar de los zombies, vuelvo a observar el cielo y noto que está más oscuro que hace un rato, el sol no está saliendo, más bien se está yendo, no quiero estar aquí de noche con zombies rondando, tengo que irme, mire hacia todos lados solo para percatarme que mi familia tampoco está aquí arriba.

―No no no ¿por qué? esto no me puede estar pasando, ¡NO!—empiezo a alterarme

¿Dónde está mi familia? Mi corazón comienza a latir más fuerte y mis ojos a llenarse de lágrimas, y una profunda desesperación me inunda. El dolor de mi cuerpo se siente menos, me preocupa más el saber que había pasado y ¿por qué estoy sola?

¿Dónde rayos están? ¿A caso me dejaron?, ¿Que voy a hacer?, mi mente no me deja pensar claro, estoy desesperada y confundida.

Volteé hacia el camino de donde veníamos, y a lo lejos se pueden ver varios zombies andando por la carretera, es obvio que no iré para allá, tengo que seguir adelante, hacia donde se supone que íbamos, pero no puedo andar por ahí desprotegida, así que comencé a revisar en los autos para tratar de encontrar algo, alguna debía tener un arma, pero no encontré nada que me pudiera servir, tan solo una linterna de baterías que para mi suerte no funciona.

Al otro lado, a donde se supone que íbamos, hay algunos árboles, creo que será una buena opción para ocultarme, iré para allá y me mantendré a salvo, pero mi hombro me está matando, aún tengo esta pieza de metal enterrada, debo sacarla, y se me ocurre una idea genial y dolorosa a la vez.

Me acerque a un auto y abrí una de las puertas traseras, ya que el frente está destrozado, acerque mi hombro con la pieza de metal a la puerta, luego la cerré con fuerza atrapando el metal entre la puerta y el auto, tan solo esa acción fue dolorosa, no puedo evitar comenzar a llorar, y mi sangre comienza a brotar, ahora solo tengo que hacer mi cuerpo hacia atrás para sacarme la pieza, pero como la puerta no cerro del todo también tengo que hacer presión para que sujete la pieza como si fuera una pinza. Pero cuando comienzo a jalar y retroceder, el dolor se vuelve terrible, puedo sentir como el metal sale lentamente, mi carne sangra y me arde, y pues solo puedo quejarme, pero trato de no gritar para no llamar la atención de los zombies. Lentamente la pieza se desprende cada centímetro que sale es un infierno de dolor, empiezo a sentirme mareada y con ganas de vomitar, pero no puedo parar ahora, seguí con mi sufrimiento hasta salió completamente.

De cierto modo siento mejor, pero la herida es grande y profunda, además está sangrando bastante, rompí una parte de la camisa de uno de los c*******s del accidente, apreté la prenda contra mi herida para tratar de parar el sangrado, y comencé a caminar.

Mientras camino puedo sentir todo mi cuerpo adolorido, pero no me detendré, la noche está cada vez más cerca. Después de unos metros llegue a los árboles, me subí a uno de ellos, si me quedo abajo puede ser peligroso, me senté en una rama y me recargue en el tronco, estoy exhausta y muy herida.

Ya no pude aguantar más, solté el llanto, no puedo comprender por qué me han abandonado, me siento triste, con el corazón roto, y a la vez molesta por tal traición cuando yo más los necesito. Solo estoy yo, y una profunda oscuridad acompañada de un pequeño resplandor solitario de la luna, la tristeza es tanta que no puedo dejar de llorar.

Tampoco puedo dormir, principalmente porque si lo hago me caeré del árbol, y por qué los gritos y ruidos a mi alrededor no me lo permiten, escucho autos pasar velozmente, gente gritar, y armas de fuego disparando por todos lados. Mi herida ya ha parado de sangrar y ni siquiera note cuando paso, pero mi cuerpo se siente raro todavía, me hormiguea, y mi cabeza comienza a punzarme con un pequeño dolor.

Después de horas de agonía al fin el sol comenzó a salir, tengo que bajar de aquí y seguir mi camino, quizá me encuentre con mmi familia más adelante, pero como estoy muy débil caí al suelo en mi intento por bajar, me senté y me recargue en el árbol a recuperarme un poco, pero el dolor volvió a mi cabeza y ahora más fuerte, tanto que mi vista se está nublando, me cuesta trabajo respirar, me voy a desmayar.

Al despertar me percate de tres zombies que están muy cerca de mí, apenas pude reaccionar y levantarme, trate de correr, pero me sentí mareada y caí al suelo boca abajo, un zombie tomo mi pierna derecha y me clavo sus dientes a varios centímetros abajo de la rodilla, puedo sentir como mi carne es atravesada.

—¡AHHH!—grite de dolor

Mientras los otros dos se acercan para también morderme, pero no lo voy a permitir,  con mi otra pierna le di una patada en la cara al que me está mordiendo, gracias a eso me soltó, torpemente me levante, y corrí lo más rápido que pude.

Ellos vienen detrás de mí, aunque avanzan lento podrían alcanzarme, ya que yo tampoco voy muy rápido que digamos, tengo que hacer algo o este será mi fin, no veo una salida o algo que hacer, así que solo seguiré corriendo, hasta que de pronto escucho unos disparos a mis espaldas y algunos parecen venir directo hacia mí, tal vez me confunden con uno de ellos, por mi aspecto y porque cojeo con la pierna que me han mordido.

Tengo que mostrar que no soy un zombie.

— ¡Alto por favor ya no dispare!, ¡No soy uno de ellos!― le dije, voltee atrás  y me di cuenta que es una chica.

Tiene un arma muy grande en su mano y otras colgando de un cinturón en su cadera, su cabello es corto y viste unos shorts con una camiseta y una chaqueta, ella lentamente empezó a acercarse hacia mí sin bajar su arma.

― ¿Quién eres? y ¿Qué haces aquí sola?— su cara está muy seria, es obvio que puede matarme si quiere.

―Yo solo…

— ¡Rápido habla!― su actitud es muy agresiva y yo estoy muy nerviosa.

—Lo siento, yo estoy tratando de escapar y estoy sola porque me abandonaron― yo la miro con miedo a que me dispare, de hecho tengo mis manos arriba.

—Entonces debes ser un fracaso para que hayan dejado sola, y a cómo te veo casi muerta debes tener cero instinto de supervivencia― bueno ella tiene razón, yo nunca había hecho nada como esto, y sí, estoy bastante herida.

—Y ¿cómo te llamas niña?―a este punto ya ha bajado el arma, ya me siento más segura.

—Soy Mila ¿y tú?― quiero parecer inofensiva, y de hecho lo soy, pero quiero llevarme bien para que no me mate.

—Soy Dara, ¿Qué te paso?― me lo dijo mientras me toca el hombro, no se lo explicaré todo.

—Tuve un accidente de auto—solo simplifique

― ¿Los que hay allá atrás?—señalo la carretera

—Sí, yo me caí en el barranco

―Está bien, no eres peligrosa, te llevare a algún lugar seguro para curarte esa herida, pero después te dejare sola, no quiero tener que cuidarte— comenzó a caminar para que yo la siguiera, y eso hice, comencé a caminar detrás de ella, pero me duele la mordida así que me cuesta hacerlo, ella lo noto que no puedo andar muy bien, pero no sabe la razón.

―Me sorprende que sigas viva—dijo aminorando su andar para que pueda seguirle el paso

—A mí también―respondí, por ahora lo que me preocupa es la mordida, no quiero decírselo, si es como en las películas, yo estoy infectada, y si ella se da cuenta me matará sin dudarlo.

—Qué raro es tú cabello― me dijo mientras lo observa, la mire algo confundida ¿qué tiene mi cabello? es castaño y eso no es nada raro. El de ella es n***o, ¿le aparecerá raro el mío por eso?

—Solo es castaño, a mí me parece normal—dije algo confundida

―No, yo hablo de tus raíces niña, son blancas— ¿cómo que blancas?

― ¿¡Blancas!? ¿En serio?— toque mi cabello muy extrañada yo no lo tenía así.

―Bien llegamos, sube— llegamos a una camioneta y subimos a ella, la chica arrancó y comenzamos a andar, me mire en el espejo de la camioneta, y es cierto, mis raíces son blancas, pero no sé por qué, así que no haré un escándalo.

Mientras avanzábamos ella se porta seria, pero de vez en cuando me pregunta algo, nada muy importante, y yo solo contesto y me quedo callada, no quiero que se arrepienta de ayudarme. Mientras tanto mi cabeza comenzó a punzar un poco más, igual que mi corazón, ambos son dolores fuertes, ¿Estaré muriendo? No quiero convertirme en un zombie.

Aproximadamente una hora más tarde llegamos a un pequeño pueblo, ya no hay personas, solo zombies rondando por ahí, todo está lleno de sangre y muertos, un ambiente muy tétrico, ella sólo atropella a algunos que se interponen en su camino, llegamos a un pequeña casa azul de dos pisos, bajamos y entramos rápido, ella atrancó la puerta y subimos a la azotea, saco un botiquín que encontró en el baño de la casa y comenzó a limpiar mi herida, duele mucho, pero tengo que aguantar, una herida como esta se debería suturar, pero no tenemos ese material, así que solo la cubrió con gasas.

Cuando terminó me dio ropa limpia que también encontró en esta casa, me tengo que cambiar ya que mi ropa está muy sucia, me dio un pantalón de mezclilla y una camiseta gris. Cuando me estaba cambiando ella inevitablemente noto la mordida, ya que el zombie no alcanzo a arrancarme  la carne, se nota claramente que es una mordida humana.

― ¡Oye tú! ¿Qué mierda es eso?— ya no puedo ocultárselo.

―Es que… el zombie—ni siquiera me dejo terminar.

― ¡Eres una maldita!, ¿por qué no me lo dijiste antes? ¡Ya me las pagaras!— saco de nuevo su arma y me apunto directo en la frente.