Decepcionar a los que quieres duele tanto. Siento que camino descalza sobre vidrios, todos ellos me lastiman y cuando cónico gritar más dolor recibo. ¿cuándo se acabará esto? ninguno me creen. No han hablado conmigo y el silencio es más mortífero que cualquier insulto ¿que pasara por su mente? Me imagino que la impresión de que su hija mayor, la buena de Alice haya caído en las supuestas drogas que sé que no existen es otro golpe duros para ellos. De nuevo estoy tentada, quiero contarles la verdad. ¿de que serviría? La situación solo está en mi contra, no hay nada que pueda ser salvo esperar como una estúpida a que ella vean convincente dirigirme la palabra de nuevo.
Ambos se van en la mañana. Escucho el viejo auto del abuelo estacionarse, veo que me han puesto chaperón y no los culpo, ah
