Herederas

Capitulo 6.-Rossy.

Ya verá, se sorprenderá de saber quién soy yo.Lo revolcaré y haré que me pida perdón de rodillas, ya lo verá bendito cretino. Creyéndose lo mejor de lo mejor, acaso cree que con tener un cuerpo de Dios y una cara bonita va a derrotarme, en sus sueños.

-¿Rossy?¡Por Dios niña! No llegaste a la empresa y ya comenzaba a preocuparme.

-¿Rossy se puede saber dónde te metiste?.-Me increpa mi hermana mayor, Ana y a su lado la metiche de Nina.

-Estoy bien, no eran ustedes las que querían que fuera al hospital, pues a eso fuí.

-¿Y como estás?

No creo poder decirles que no llegue a ir porque me encontré con un cretino en el camino y el mismo que me causó esta herida.

-¿Rossy?

-Estoy bien, la Dra Thompson fue quien me atendió, más bien, manda saludos.

-¿Segura que estás bien?

-Sí, lo estoy, más bien Nina, cambio de planes, voy a presentar el aplicativo en la feria de la otra semana.

-¡¿Que?!¿Tú?.-Mira a mi hermana sin poder creerlo.

-¿Y eso porque Rossy?¿Porque ese cambio de planes tan repentino?

-Ana, yo también intervine en ese proyecto¿No? Tengo derecho a hacerlo, además ya lo pensé bien, quiero presentarme como lo que soy, Rossy Favre.¿Puedes ayudarme?

-Rossy, ¿Estás segura que el golpe no te chocó?

-Ay Nina no. Estoy bien, es solo que estoy harta que los de Millenium Tecnology se crean lo mejor de lo mejor cuando son solo una copia barata de nosotros, además, esa empresa no sería lo que es hoy sin nuestro apellido.

-Rossy, deja de hablar así. Sabes muy bien que Matt ha hecho un esfuerzo único para hacerla llegar donde esta, aunque admito que aprovechó que nos unía un papel.

-Lo que espero se rompa pronto Ana, Matt Redmayer y tú deberían ya no volverse a ver nunca. Tú tienes una legión de pretendientes que morirían por estar contigo.No entiendo que pasa para no divorciarte ya.

-Y Matt también tiene una legión de mujeres detrás de él querida Rossy, y no creo que a tu hermana le agrade la idea.

-Nina , deja de decir eso.

-Ay ya, pero es cierto.

No sé a qué se refieren, pero no me importa. Ahora lo más importante es destruir al enemigo.

-Ana, porfavor, déjame esto a mí. Hablaré con Hugo y le pediré toda la información sobre el aplicativo, descuida no te defraudaré hermana.

-Rossy, tú nunca me has defraudado, y sí, por supuesto que te presentaré en sociedad ese día, así que ponte bonita.

-¿Bonita? No necesito ponerme un retazo de tela y maquillaje para serlo, yo ya lo soy Ana.

-Bien, solo lo decía por qué me preocupas, eres mi hermanita menor Rossy y solo quiero que te sientas bien y segura, que no te perturbe no tener enamorado.

-¿Otra vez con eso?

-Vamos Rossy, ya tienes 24 y si sigues vistiéndote así, jamás vas a conseguir novio.

-¿Novio?¿Para que Nina? Los hombres son...

Recuerdo al patán que me atropelló y se me sale toda la rabia.

-Son ratas sucias que solo te hacen perder el tiempo, que se creen que pueden controlarte y decir que hacer.

-Rossy, si sigues con ese carácter desafiante y teniendo ese concepto de los hombres sin conocerlos, vas a terminar a vestir santos.

-Prefiero quedarme soltera Ana, pero si me interesara un hombre, tu serías la primera en saberlo, descuida. Más bien, ahora voy a hablar con Hugo, necesito que me dé el manual del aplicativo, adiós.

Me alejo de ellas e intento subir a mi habitación. ¿Quien necesita a un hombre a su lado para ser feliz? Nadie, al menos yo no. Ay no, si es una feria tecnologica dónde estará la prensa y la alta sociedad, deberé ir presentable y no creo que tenga algo en mi clóset, quizas Nina me pueda ayudar. Bajo y parece que hablan de algo.

-Esa niña me preocupa cada vez más Nina .¿Porque querrá ser ella quien presente el aplicativo? Siempre ha sido ajena a lo que le pase a la empresa tecnológica, raro.

-Mmm, bueno, si que es raro, pero no me sorprendería saber que sea por un hombre.

¿Que dijeron? Bueno, sí es un hombre, pero no es lo que ellas creen.

-¿Tú crees que le guste alguien?

-Ay Ana, si eso fuera cierto, yo me convierto en monja. Rossy nunca le ha interesado los hombres, siempre ha sido más enfocada en los estudios y trabajo, y que alguien se enamore de ella con esas fachas y mal carácter pues si que está bien difícil.

Eso fue un golpe bajo. Dolió mucho, lo que me hizo recordar a ese cretino.

-No digas eso Nina, en parte es mi culpa que Rossy no confíe en los hombres.-Sí que es su culpa.

-¿Lo dices por Matt? A ver ,vamos cuéntame eso que me dijiste que me ibas a contar antes que Rossy nos preocupara.

-Bueno, es que estoy confundida, no se por donde comenzar.

-Solo dilo, no la hagas larga.

-Matt me besó.-Algo susurra en voz baja pero no puedo oírlo.

-¡¿Cómo?!¡Cuéntame eso con lujo de detalles!

¿Que paso?¿Que le dijo para que se sorprendiera tanto?

-Ayer después de que te fuiste y Rossy se fuera a su habitación, Matt y yo nos quedamos conversando.

-Ajá, ajá,¿Y?

Mi hermana se calla, la miro haciendo un puchero.

-Y pues me besó sin ningún aviso, me dijo que era su esposa, que no tenía derecho a estar con otro, que solo él..

-¡¿Que?!¡Habla!

-Que solo él podía hacerme sentir mujer, que nadie más lo haría.

-Oh My God, ¡¿Y?!.-Se calla por un instante y yo estoy en shock.

¡¿Que?!¿Ese patán besó a mi hermana?

-¡Ana! A ver cómo es eso, no me dejes con la duda por favor, cuenta como estuvo ese beso, ¿Sigue besando tan rico como hace dos años?

-¡Nina no me estás escuchando! Él me besó a la fuerza, no porque yo quisiera.

-¿Y que sentiste?¿Porque lo hizo?

-Yo que sé, solo le recriminé que así como él debía tener sus amantes por ahí, yo también tenía derecho, que ya había probado mejores que él.

-Ah claro y no soportó la sola idea de perderte.

-¿Que?

-Vamos Ana, ¿No crees que él siga gustando de tí? Un hombre celoso es difícil de ocultar, además, yo creo que esa pelea de anoche fue por tí.

Ana se queda pensativa.¿Acaso ese tipo se peleó anoche? Con razón la herida en su mano.

-No lo sé Nina, le pregunté pero me respondió que no era de mi incumbencia, tarado.

-Tarado pero lindo, admítelo, aún te sigue gustando Matt, esos ojitos no pueden mentirme Ana.El beso te gustó.

-Ay Nina, seguía besando tan, tan...

-¿Tan que?

-Sigue siendo tan apasionante, deseoso y sus besos siguen siendo tan deliciosos Nina, que juraría que ese beso no fue nada, que quería más y si Martha no llegaba en ese instante hubiese pasado más cosas.

-Ay amiga, tú sigues templadaza de él apesar de lo que te ha hecho y él quizás también, entonces no entiendo, porque simplemente no te dice que te ama, que se arrepiente, ¿Que lo ata a decirte sus sentimientos?

-¿Tu crees que yo sigo gustándole?

-Yo creo que sí, la cuestión sería porque se comporta así.

No puedo creerlo, después de todo lo que ese tarado de Matt hizo con mi hermana Ana, aún le sigue gustando, por eso digo que el amor es de tontos.

Subo a mi habitación y me encierro. Veo una foto de mi familia, somos 3 hermanos, Ana, mi hermana mayor, Ángel, mi otro hermano mayor, ya que Ana y él son mellizos y yo, la menor y olvidada. Sí, para que negarlo, Ana y Ángel son los que mis padres más quieren, solo mi abuelo Emilio, padre de mi madre, me demuestra que soy su favorita, quizas porque soy pelirroja igual que él, por eso prefiero no involucrarme mucho en los negocios de la ciudad, pero está bien, no me importa, ya me acostumbré.

Recuerdo las palabras de Ana y sí que es una tonta. Matt le hizo mucho daño y aún así lo sigue amando.

-Yo nunca voy a confiar en un hombre, son todos unos canallas, mentirosos y patanes, como Matt y ese idiota que no se su nombre, mucho mejor. Mira que decirme fea, sin gracia y amargada, imbécil.

-Miau.

-Ay conejo, aquí estabas, solo en tí puedo confiar. Tú si me puedes escuchar sin criticarme.-Me mira con sus ojitos azules iguales a los míos.-¿Crees que soy una fea y amargada como ese patán dijo? No verdad.

Me apoyo en la pared y me enrollo como caracol en el piso.

Pero a quien quiero engañar, no soy tan bonita como lo es Ana, la favorita de papá y del abuelo Louis. Mis lágrimas caen sin que lo pueda evitar, en verdad nunca me ha interesado sobresalir en nada, no soy bonita ni atractiva, como dice Nina, ningún hombre pondría sus ojos sobre mí.

Amargada, fea y sin gracia.

-Miau.

-¡Ay tarado! Puedo soportar que la burla sea de cualquiera pero no de ese imbécil, idiota. ¡Ya verás! Te vas a arrepentir, te voy a ganar en el lanzamiento, voy a hacer que te comas tus palabras, trabajador de...

-¿Srta Rossy?.-Escucho a Martha en la puerta, solo espero que no haya visto que lanzé la almohada.-¿Puedo pasar?

-Sí, adelante.

Entra y deja mi ropa. Ella es mi Nana y la mujer que vio a mis hermanos mayores crecer. Quizás si le pregunto, ella pueda ser más sincera.

-Oye Martha, puedo hacerte una pregunta.-Asiente pero no estoy segura.-Bueno, quiero que me digas la verdad. ¿Yo soy bonita?

-¿Cómo?

-Digo que si puedo ser atractiva para los hombres.

-Mi niña, usted es preciosa, incluso más que la Srta Ana. Si tan solo mostrara esas piernas que se maneja y un poco de esa delantera, cualquier hombre caería a sus pies.

-Ay vamos Martha, no bromees, quiero que seas sincera, aunque sea duro de aceptar, no me molestaré.

-Pero si estoy diciendo la verdad, tiene un cabello hermoso y único y unos ojos que deslumbra hasta al más ciego, es solo que le falta más confianza en usted misma Srta, además.-Hace que me siente y mire al espejo.-Si se soltara el cabello y se quitara esos lentes, usted podría hasta opacar a su hermana.

-¿Más confianza en mí?

-Sí Srta Rossy. Debe tener más confianza, usted es la más inteligente de los tres, si se lo propone puede tener al hombre que deseara.

No sé porque pero me viene a la mente ese bandido idiota que me golpeó con su auto.

-Sabes que Martha, tienes razón, mucha razón, voy a demostrarle al mundo que no soy solo la tercera y última hija de los Favre, le demostraré a ese idiota que soy inteligente y bonita, que puedo conseguir al hombre que deseo. Ya verá, haré que se trague sus palabras.

-Muy bien Srta. Siga así, ya verá que ese hombre caerá a sus pies, se arrepentirá por dejarla ir.

-Ajá, se arrepentirá por dejarme ir, espera ¿De que hablas?

-¿No quiere impresionar usted a un hombre acaso?

-¡No! Bueno sí, pero no es lo que estás pensando. Ese imbécil me hizo esto Martha.-Le señalo mi parche.-Me dijo que era fea, amargada, que nadie se fijaría en mí. ¡Idiota! Voy a hacer que se arrepienta.

-A ya entiendo, bien siga así, hará que caiga igual.

Martha si que es terca, no es que quiera impresionar a ese imbécil, solo quiero que, ¿Que quiero?

-¿Y ya tiene un atuendo para deslumbrarlo?

-¡Es cierto!¿Con que ropa se supone que debo ir una reunión de lanzamientos? Irá toda la sociedad Londinense.¿Estará bien con un pantalón y camisa?

Martha suspira, busca en mi clóset pero no creo que encuentre algo adecuado.

-Mmm, creo que debería renovar este clóset, tener ropa mas juvenil, que destaque.

Tiene razón.

-Martha, tú crees que me puedas acompañar a comprar ropa, pero sin decirle a Nina ni a Ana, no quiero que piensen mal.

-No se preocupe mi niña, por supuesto que puede contar conmigo.

Arreglamos mi cuarto y al cabo de unos minutos salimos sin que nos noten

Vamos a la tienda de ropa de la familia de Nina, una de las más exclusivas de la ciudad, ahí Martha me ayuda, como se nota que no sé nada de moda.

Con ayuda de la vendedora y de ella, me eligen dos vestidos, ninguno es de mi agrado pero según ellas, me ayuda a resaltar mi figura.

-Martha no estoy segura.

-Mi niña.-Me quita mis lentes y me suelta el cabello.-Ahora sí, ese hombre va a caer rendido a sus pies.

-¿Hombre?.-Sí, quiero que se arrodille, que me pida perdón por haberse burlado de mí.

-¿Disculpe?¿Srta Favre?.-Oh Diablos, alguien me reconoció.

-¿Sr Collins?

-Vaya, por un momento creí haberme equivocado, está usted muy cambiada, digo, muy hermosa.-Martha me mira con ojos de triunfo.¿En verdad me veo diferente?

-Sr Collins, vaya, que casualidad encontrarnos en una tienda de modas para damas.

-Bueno pues, traje a mi secretaria a que eligiera un vestido, es su cumpleaños y quise ser detallista con ella. En estos momentos se está probando uno.

-¿Así? Es usted un caballero Sr Collins.

No sé porque pero no me gusta como me mira.

-Por si cierto Srta Favre, estoy ansioso por la feria de la otra semana, esta vez será su hermana quien presente lo último en tendencias tecnológicas o será...

-No Sr Collins, está vez seré yo, así que espero que sea de su agrado y contemos con su colaboración.

-Para mí será un honor, todos los servicios y productos de los Favre son de mi absoluta satisfacción, no dudo que lo que lancen será un éxito, más si es usted quien lo haga.

-Muchas gracias, espero que sea de su agrado.-Toma mi mano y me da un beso, Oh Dios, es la primera vez que un hombre lo hace.

-Esperaré ansioso verla deslumbrante ese día Srta Favre, tenga por seguro que seré un comprador potencial.

-No lo dudo.-Se aleja dándome una sonrisa que me incomodó, debo aceptarlo.

-Vaya, no le digo yo. Con ese vestido conquistará a quien quiera, como a ese hombre.

-¿Ese? Ni lo observes Martha, por lo que escuché, el Sr Collins se acaba de casar, creo que ayer, más bien, debería estar en su luna de miel, raro que ahora se este paseando con su secretaria, disque regalándole un vestido por su cumpleaños.

-Eso no suena bien, pero ya vió que robó su atención y el chico que usted quiere no tardará en tenerlo en la palma de su mano.

-Sí, en la palma de mi mano. ¡Que no Martha! No es lo que piensas.-Me quejo y ella sonríe.

Me miro al espejo. No sé porque pero es la primera vez que me siento femenina, más bonita, más resaltante y elegante.

-Srta Rossy.

-Me lo llevo, ah y esa minifalda también.

Al final terminé comprando unos jeans, un top, unos zapatos de tacos y unos vestidos de gala, lista para renovar mi clóset pero más para la feria de lanzamientos, esa era la razón. Ya verás desconocido que trabaja en la empresa de los Redmayer, te ganaré y tendrás que aceptar que la de mi familia es la mejor, de rodillas, como que me llamo Rossy Favre.