-Te ves demasiado sexy bailando- Murmura Liam en mi oído.
La música resonaba por el lugar a todo volumen, las personas se movían unas con otras, como si la vida les dependiese de ello. A este punto, todas las personas que quedaban, ya estaban, o bien borrachos, o teniendo sexo en una de las habitaciones.
Bad b***h comenzó a sonar al ritmo de Bebe Rexha, por lo que me pegué más a Liam y disfruté la canción como nunca.
-You're sayin' that your tired of all your empty habits
You want something that's deeper 'cause you're over the generics
You're fuckin' with them basics when you really want the baddest
So come on, baby, get it, 'cause to miss it, it would be tragic
You say you want a bad b***h, baby, now you have it
Now you got a bad b***h, show me you can handle this
Say you want a bad b***h, baby, now you have it
Now you got the baddest, show me you can handle this//
Dices que estás cansado de tus hábitos vacíos
Quieres algo que es profundo porque estás por encima de lo genérico
Jodes con los principios cuando tú en realidad quieres lo más malo
Pues vamos, nene, consíguelo, porque para extrañarlo, podría ser tragico
Dijiste que querías a una perra mala, cariño, ahora la tienes
Tienes a una perra mala ahora, muestrame que puedes hacerte cargo
Dijiste que querías a una perra mala, cariño, ahora la tienes
Tienes a la más mala ahora, muestrame que puedes hacerte cargo -Canté, pegando mis caderas contra su entrepierna y pasando mis manos por detrás de su cuello.
-Creo que tienes un problema ahí abajo- Río besando su cuello.
-No puedes hacer eso y esperar que no pase nada- Replica. De la nada, me toma cual princesa y camina en dirección a las escaleras- Necesitaremos privacidad- Aclara al ver mi ceja arqueada.
- ¿Está vacío...? - Sus labios me interrumpen en un beso desgarrador.
Liam se encarga de cerrar la habitación, para después levantarme e, inmediatamente, yo rodeo su cintura con mis piernas. De un momento a otro, entre besos y roces, mi chaqueta desaparece, al igual que su camisa, sus labios vuelven a los míos, acercándome más a él.
Mis manos van directamente a su cabello, despeinándolo, él aparta sus labios de los míos para dejar rápidos y ardientes besos en mi cuello, al mismo tiempo que yo me encargo de quitarle sus jeans. Él separa una de sus manos de mi trasero para desabrochar mi vestido y, en cuestión de minutos ya no lo tenía puesto, al perecer, mi sujetador también se fue.
Liam me estampó contra la pared, dejándome sin habla, cuando sus labios fueron a mis pechos, yo me encargué de quitarle su ropa interior. Y él tampoco perdió el tiempo en quitarme la mía. En menos de diez minutos, no sé cómo pasó, pero él estaba dentro de mí y yo estaba suspirando a la vez que enredaba mis dedos en su cabello.
Dentro fuera, dentro fuera, dentro fue... Oh, tenía un tatuaje en forma de mariposa...
Si... Creo que bebí demasiado, ambos bebimos demasiado. Entonces él me besó, yo lo besé. Lo acerqué más a mí, él se acercó más. Mordí el lóbulo de su oreja, él gruñó con deseo. Me elevé. Él se elevó. Ambos volamos.
-Liam...- Murmuré al límite.
-Si- Gruñó por última vez, dejando caer su cabeza en mi hombro.
-Wow- Suspiré, provocando que ambos riéramos.
-Es mejor que durmamos, preciosa- Murmura divertido, llevándome consigo a la cama- Ya tuvimos suficiente acción por una noche- Dice acostándose conmigo y acercándome a su lado, para después besar mi mejilla.
-Ni que lo digas- Susurro, abrazándolo, para después cerrar mis ojos.
***
- ¿Estás segura, M? - Pregunta All con seriedad- Porque si tomas la píldora del día después y no olvidaste la normal, ninguna hará efecto- Agrega.
-Lo sé, lo sé- Digo caminando de un lugar a otro, con nerviosismo- Estoy casi segura de que no la tomé el fin de semana pasado, estábamos en la casa de Emma, cuidando a su hermano, y yo olvidé llevarla, pero creo que no la tomé al llegar a casa- Repongo entrando en pánico.
-No puedes arriesgarte a que ninguna haga efecto, M- Dice acercándose a mi lado- Llevas tomando la píldora desde que, ¿los dieciséis?, es casi imposible que quedes embarazada- Repone posando sus manos en mis hombros.
-Ese es el problema, casi- Replico sentándome en su cama.
- ¿Que te dijo la doctora Sanders? - Pregunta sentándose a mi lado.
-Que mi cuerpo se ha acostumbrado a la píldora, debido al tiempo que hace que la tomo, y que aunque esto no quiere decir que puedo hacerlo siempre sin tomarla, en esta ocasión, no cree que corra riesgo de embarazo- Respondo tal cual lo dijo la doctora- Pero aun así, dijo que espere unos días para hacerme el test, y que, mientras tanto, no beba alcohol ni me mueva demasiado, por si acaso, ah, también dijo que éramos unos irresponsables y que no tiene que volver a repetirse- Agrego dejando caer mi cabeza en su hombro.
- ¿Ves? Debe ser solo una falsa alarma- Dice tomando mi mano- Por ahora, solo queda esperar y ver que ocurre- Repone.
-Solo queda esperar...