Capítulo veinticinco:Baile prohibido

2419 Palabras

El silencio apenas perceptible que antecede a una entrada importante se apoderó del salón cuando las puertas se abrieron. Tomados del brazo, Silas y Bernadette Deveraux hicieron su aparición. El vestido que ella llevaba capturaba la luz de los candelabros como si cada pliegue hubiera sido tejido con hojas de cristal. Su porte era elegante, su andar firme y sereno. Tomaba la mano de su esposo con seguridad, aunque sus ojos se movían con curiosidad contenida, explorando los rostros, los colores, los olores, como si por fin hubiera salido a la superficie después de una larga inmersión. Era la primera vez en sociedad como esposa, y los ojos, curiosos, recorrían cada detalle: el cabello rubio platino, los pendientes de perlas de los Laurent, el porte que no necesitaba palabras. A su lado, Si

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR