"Sí...! Así es..." asentí sin aliento, mis dedos envolviéndose instintivamente alrededor de los ejes de dos pollas gruesas, negras y jóvenes mientras miraba a mi alrededor a sus caras sonrientes, "Los estoy ayudando a todos a mejorar en el baloncesto..." repetí débilmente, acariciando sus pollas mientras chupaban mis tetas con entusiasmo, mi coño estaba llegando a su límite mientras sus dedos provocaban mi clítoris implacablemente.
Me estaba volviendo loca de placer. "Dios mío... Estoy tan cerca...", jadeé, apretando con más fuerza las palpitantes vergas de Winston y Marvin. Mi cuerpo temblaba de excitación; nunca antes había estado tan excitada. Estaba completamente abrumada; mi cuerpo temblaba de deseo, y sentía como si todo mi cuerpo ardiera. "Duaaaanne...", giré la cabeza hacia él y m
