Perla
Los días habían pasado tan rápido que no me hubiera gustado que fuera así, estaba feliz porque mi hermano estaba logrando su felicidad, el juicio se había ganado, tenían que devolverle todo el capital que le habían congelado en sus cuentas bancarias, también había obtenido una indemnización por los daños que ocasionaron al momento del juicio.
Estaba feliz por el, porque sus problemas económicos y laborales se habían solucionado, Lina lo apoyaba sin lugar alguna y porque dentro de 2 días sería la reapertura de la empresa.
Pero en lo que respecta a mi no se como sentirme, si bien el diagnóstico era uno, siempre que veía a mi abuelo lo veía como si todo lo que dijeran los estudios fuera incorrecto, para mi el estaba mejorando y eso era lo importante, me hacia sentir mas tranquila.
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