El bullicio familiar llena el salón privado del restaurante, risas, conversaciones animadas y el tintineo de las copas crean una atmósfera cálida y festiva, Bárbara y Renato miran complacidos la alegría que expresa su hijo y secretamente se burlan de los nervios que deja entrever en su comportamiento. Rodrigo, observaba con devoción a Violeta, mientras ella ríe con Ana, de la actitud que ha tomado Elba desde que vió a su guardaespaldas. Diego mientras degusta su postre, se pregunta cuál es la verdadera razón de que su nuevo cuñado haya organizado esta cena, supuestamente es una celebración familiar sin un motivo específico, pero tiene las sospechas que la noche guarda un propósito. Una cosa es que él y las amigas de su hermana hayan sido invitados a una cena, pero la presencia de los pad

