Maldita rata

Capítulo 3

CLAIRE

Después de ese momento incomodo con Adonis ya no hablamos mas hasta llegar a mi departamento.

Simplemente nos despedimos y yo subí a mi piso y pude volver a respirar.

***

Una semana ha pasado desde que trabajo para Stephano, no me puedo quejar del lugar.

Stephano es un jefe muy comprensivo, no me exige llevarle café y no me sobrecarga con el trabajo.

Ahora estoy revisando la agenda de la semana que viene, necesito saber que reuniones tiene Stephano y a cuales no podrá asistir.

Reviso los archivos y veo que tiene una cita programada con Barbara Suliman el día miércoles de la semana que viene.

Barbara Suliman, dueña de la mejor tienda de modas, es modelo, cantante y actriz, una mujer perfecta, tiene tanto dinero que hasta debe tener un wáter de oro.

Lo mas seguro es que ella sea una de las candidatas para casarse con el empresario Stephano Owen.

Ambos harían una linda pareja, hasta ya me imagino a sus hijos.

Estoy tan metida en mis pensamientos que no me doy cuenta que Stephano me esta observando.

—¿En que estas tan perdida Claire? — me dice él

—No es nada, solo me quede pensando — le digo y siento como mis mejillas adquieren un tono rojizo.

—Te ves adorable cuando te sonrojas — me dice él y se acerca lentamente hacia mi

—Eso es mentira, cada vez que me sonrojo parezco un tomate — le digo

Es cierto, cada vez que me sonrojo toda mi cara se vuelve roja y eso me estresa.

—¿Me quieres acompañar a almorzar? — me dice Stephano

En que momento se paso tan rápido la hora, siento que he llegado a la oficina hace 10 minutos.

—Ah...okey, vamos — le digo y me paro del escritorio

STEPHANO

Una semana ha pasado y aun no he tenido la oportunidad de acercarme a Claire, ella se ve tan inocente, pero no lo es.

Ya caerá, yo lo se.

—Te quiero llevar a comer pastas — le digo

—Amo las pastas — me dice ella y se ríe

Su risa, es el sonido mas bonito que estoy escuchando...¿serán igual de bonitos sus gemidos?

La llevo a "TRATTORIA DON VITO", es uno de los mejore lugares que hay para comer pastas.

—Buenas tardes, tengo la reservación al nombre de Stephano Owen — le digo a la señorita de la entrada

—Buenas tardes, adelante, su mesa esta en la habitación 3 — me dice ella

Reserve algo mas privado para así conocer a Claire y poder tenerla solo para mi.

—Vamos — le digo a Claire y la llevo a la habitación

Claire me sigue y entramos a la habitación, donde hay una mesa y dos sillas juntas.

—Wow, esto es increíble — dice ella admirando la habitación

—Solo quería que estés mas cómoda—le digo

—Gracias — me dice ella y se sonroja

¿Es normal que me guste ver a Claire sonrojada?...no lo creo

La comida ya la había pedido y solo espero que a Claire le guste.

CLAIRE

La comida comienza a llegar y la boca se me hace agua.

El olor de la pasta con la carne mas el queso y todas las salsas hace que mi estomago se comience a despertar y quiera devorar todo lo que ve.

Stephano se me ayuda a sentarme y el se sienta a mi lado.

Esto es un tanto incomodo, no se que hacer y yo solo quiero comer.

Veo a Stephano tomar los cubierto y agarrar un palto de lasaña.

—Ahora me dirás que te parece — dice él mientras corta la lasaña.

Stephano acerca el cubierto con un poco de lasaña a la boca.

¿Quiere darme de comer?

Yo solo lo miro sin poder articular ninguna palabra ni mover ningún musculo.

—Vamos Claire, pruébalo — me dice Stephano

Acerco mi boca al cubierto y pruebo la lasaña.

Mil, mil cosas estoy sintiendo en mi boca, sabores que jamás en mi vida he probado, sensaciones que nunca he experimentado, esto es estar en la gloria.

¿Acaso ya estoy en el cielo y no lo sabia?

Termino de pasar el bocado y ya quiero mas.

—¿Te gustó? — me dice Stephano

—Si — le digo yo

Veo que Stephano se acerca a mi peligrosamente y su mano esta dirigiéndose a mis labios, no lo detengo, pero quiero hacerlo.

—Te habías manchado — me dice él limpiando la comisura de mi labio con su pulgar

—Ah...gracias — le digo

—No hay problema — me dice él y chupa su dedo manchado

Ah no señor, este cree que puedo caer a sus encantos solo por ser guapo, ser fornido, parecer un puto ángel caído o mejor aun un pinche demonio que esta dispuesto a hacerme pecar y yo estoy dispuesta a portarme mal.

—Solo te ve como un pedazo de carne, piensa tantito — me recrimino mientras miro como chupa su dedo

No voy a caer, él piensa que por darse el galán y el coqueto yo ya estaré abierta de piernas en su escritorio esta muy equivocado.

Si él quiere jugar yo también puedo hacerlo.

STEPHANO

Veo que Claire esta un poco sonrojada, pero no parece intimidada por mi.

No es la primera vez que recurro a esta estrategia para que las mujeres caigan, pero si mi memoria no falla ella ya estaban besándome en este momento.

—Creo que esta servilleta le serviría mas — me dice ella y me da una servilleta para limpiar mi dedo

—Si, gracias — le contesto y recibo la servilleta

Seguimos comiendo ya cada uno por su cuenta y conversamos temas sin importancia.

—Gracias Stephano por el almuerzo, estuvo delicioso — me dice ella y se muerde el labio inferior

Yo también quisiera poder morderlo — pienso

—Gracias a ti, por tu grata compañía — le digo y le abro la puerta del auto para irnos a la empresa.

***

Estoy en mi oficina y ya son las 6 de la tarde.

Tengo muchas reuniones para esta semana que viene y si no me equivoco dentro de unas 2 semanas tendré que viajar a Londres por un nuevo proyecto que se esta haciendo.

Esta es una empresa que destaca muchos puntos, pero nos centramos mas en la industria del petróleo y la construcción de mansiones(para los millonarios), las casas, edificios, puentes, diferentes cosas.

Mi padre era un maestro en la industria del petróleo, yo no soy muy bueno en ello ya que me centre en estudiar ingeniería civil y puedo decir que soy el mejor en lo que hago.

Sigo leyendo los puntos a respetar que mando el señor Traviss, dueño de los casinos mas famosos en las Vegas.

El señor Traviss quiere una lujosa mansión para su hija que se casara dentro de unos meses y quiere que yo la diseñe.

Mi trabajo en si debería ser solo ver la construcción de la casa y algunos puntos que se dan a conocer en mi carera, pero también diseño, me gusta trabajar solo, no creo en el trabajo en equipo.

—Señor, la señorita Suliman esta esperando a ser atendida — me dice Claire entrando a mi oficina

—Hágala pasar — le digo

Barbara es una chica muy guapa, pero no quiero anda con ella.

Solo tuvimos unos encuentros, pero nada más que eso.

Ella sabe lo que pienso sobre lo formal, es por ello que nunca me insiste en el tema.