En lo profundo

capitulo 5visita al sabio

capitulo 5 Visita al sabio

Ariana pasaba los días siguientes sin poder dejar de pensar en aquel joven tripulante. Lo tenía constantemente en sus pensamientos, anhelando verlo de nuevo. Frecuentaba el lugar donde sus ojos lo habían divisado por primera vez.

Después de un largo día de clases en la preparatoria, decidió visitar a Serafín, el pulpo sabio. Acudió a él en busca de ayuda, con un profundo deseo de ser hermosa. Anhelaba ser linda.

"Así que me dijo serás bonita pero por un día podrás será te daré consejos para ser bonita y quererte como eres el fin es que te acepte a así como tu eres volverás a

"Está bien, así sea", respondió Ariana con determinación. "¡Gracias por tu ayuda!".

Esa noche ¡Su sueño se hizo realidad! ¡Se transformó en una chica hermosa! Gracias al consejo de serafín el le dió consejos que le levanto el ánimo y le permitió sentirse mejor con ella misma y tomar la decisión de arreglar su aspecto físico ahora se arreglo todos los días no dejaba de arreglar su cabello adornaba su hermoso cuello con cueca de mar y también usaba algo de maquillaje el hablar con el sabio serafín la ayudo a sentarse mejor y se dió cuenta que no le hacía falta de nada extremo para verse bien que era noble de corazón y era una jovencita especial.como se lo decía su familia ella era muy tímida sufría pero el hablar con este señor sabio le dió seguridad en su interior y la ayudo a darse cuenta que poseía nobleza

Comenzó a cantar su hermoso cántico, y justo entonces, volvió a ver al joven tripulante. Allí estaba él. Sus miradas se cruzaron.

Él quedó cautivado por sus ojos y su hermoso canto. Esa noche, pasearon por el mar hasta el amanecer. Pero al despertar a la mañana siguiente, volvió a ser la de siempre, y él se había ido.

Fue difícil, pero lo aceptó. Se sintió tan feliz de haber logrado su sueño de convertirse en una jovencita linda, aunque fuera por poco tiempo. La felicidad fue pasajera, pero al menos esa noche pudo estar junto al joven que le robaba suspiros y le había dado la motivación para querer cambiar.

Pasaron los días y las noches. Ariana volvió a cantar su dulce melodía. Esas canciones eran hermosas. Tuvo miedo y se escondió, sin saber qué hacer, aterrada de su reacción hacia ella.

"¡No temas!", la buscaba desesperadamente. "¡No te haré ningún daño! No soy mala persona, no tienes por qué esconderte de mí. Tranquila, deja de huir de mí".

Ariana reunió valor y salió de aquella inmensa roca. Sus ojos se encontraron.

"¡No bajes la mirada!", le dijo él. "Mi nombre es Andrés".

"El mío es Ariana. Tuve miedo de asustarte y me escondí. Siempre vengo aquí, me gusta mucho contemplar el mar, ver la luna y las estrellas", resplandeciente cielo no me asustaste así que tranquila después de ese emocionante encuentro se marcho muy feliz por lo pasado esa noche mi corazón latir sin parar a toda.

velocidad.