Zack se encontraba sentado frente aquella hoja de papel, su rostro seguro se veía igual de blanco. No sabía qué escribirle a Laurie, bueno no, no sabía cómo escribirlo o por dónde empezar. A pesar de que sus amigos le habían ofrecido su ayuda, el la había negado. Esto era personal y suyo, lo poco que le pertenecía. Miro el reloj, en una hora terminaba el turno de la empleada de Laurie, a quién debía entregarle la "carta". Debía apurarse. "Puedo hacerlo" susurró Zack para sí mismo y tomó el bolígrafo para comenzar a escribir. 《 Nunca he tenido intimidad en esta clase de juegos, así que desconozco mis propios límites. Pero por mi Dom, estoy dispuesto a que me enseñes Laurie. Aceptaré el trato que quieras tener, pero eso no hará que quiera obedecerte. Ya lo has visto, señor Parrish. No fo

