Intenté distraerme para dejar de pensar en Anna. Tenía planes de pasar una noche tranquila y relajada con ella el otro día, pero las cosas tomaron un giro diferente y, en lugar de una noche relajante, terminamos teniendo una noche incómoda y tensa. No habíamos hablado desde entonces y la extrañaba. La extrañaba muchísimo. Frankie decidió visitarme en mi cabaña y me sorprendió enterarme de que ahora tenía novia, Nela. Nunca pensé que llegaría el día en que Frankie estaría en una relación. Tenía más posibilidades yo, o eso creía. —Entonces, ¿dónde se conocieron? —pregunté a los dos tortolitos mientras les servía cócteles. — En Alemania —respondió Nela con un marcado acento ruso. Por supuesto, Frankie conocería al amor de su vida en una playa nudista. —La vi corriendo por la playa con sus

