-Estas muy callada, ven bajemos a tomar agua-Ryūjin sujeto mi cintura para poder bajarme del caballo
- ¿Qué tienes? – me acomoda un mechón de cabello atrás de la oreja
- Lo que harás es una locura, ya estaba comprometida con Izumi- Ryūjin se encoje de hombros sin darle importancia
– Los compromisos se pueden romper y además tu padre sabe de nosotros, creo que, si piensa un poco, tu padre se dará cuenta que estarás mas protegida con un dragón que con una bestia-
Me quedó callada sopesando lo que dijo, en el fondo sabía que Ryūjin tenía razón
– Solo déjame hablar con tu padre-
tomo mi rostro y lo alzó para que pudiera verlo a los ojos, solo pude asentir
–Ven sigamos nuestro camino, como llovió toda la noche será mejor ir con cuidado- ya solo podía asentir.
Llegamos al palacio justo al atardecer, los guardias nos vieron a lo lejos yo montando el caballo y a Ryūjin llevándolo de las riendas caminando a lado, los guardias desvainaron sus katanas, Ryūjin levanto las manos ante tal recibimiento, el caballo sigue avanzando y Ryūjin sigue caminando a su lado
– Ni un paso más-
-Bajen sus armas Atsushi-
-Pero mi señora…-
-Dije ahora, ¿A si es como reciben al hombre que salvo mi vida- Mi guardia personal se agacha ante tal falta
–Perdone nuestro arrebato, mi señor-
- Díganle a mi padre que ya estoy aquí y que estoy bien, también díganle que Yoshiyama Ryūjin quiere hablar con el- Los guardias salen disparados a dar el recado de la princesa
-Vaya hace unas horas estabas calladita y ahora actúas como la princesa que eres-
-No te burles, tengo que tener cierta autoridad ahora que mi padre está enfermo- Ryūjin me ayuda a bajar del caballo tomándome de la cintura
– Tienes razón en actuar así- Ryūjin y yo caminamos hasta la entrada del patio donde se escucha mucho ruido y de pronto queda todo en silencio al ver a la princesa entrar sana y salva, mi padre deja lo que estaba haciendo y corre para abrazar a su única hija.
– Hija mía estas bien-
-Estoy bien papá-
-Izumi me dijo que discutieron y qué saliste huyendo- Le dedico una mirada asesina a Izumi al ver que se dirige hacia nosotros
- Papá será mejor que hablemos en privado-
-Matsuyama -dono soy Yoshiyama Ryūjin y necesito hablar con usted en privado y solicito que esté la princesa presente.
-Papa por favor- papá asiente
– por aquí Yoshiyama-San- vamos a un pequeño salón para que podamos hablar en privado Ryūjin se hace a un lado para que pase primero, después mi padre le pide que pase, entra y se coloca a lado de mí, papá entra y cierra las puertas detrás de él y antes de que pregunté qué pasa Ryūjin toma aire
- Matsuyama-san he venido a qui por dos razones, la primera traerle a su hija sana y salva y la segunda a pedirle su permiso para que me deje cortejar a la princesa
- ¿Pero qué broma es esta Yoshiyama-Dono? -
-Lamento decirle mi señor que no lo es, cuando vi por primera vez a la princesa me enamoré de su belleza y quisiera verla hasta el fin de mis dias- papá ya estaba listo para pelear, al ver que papá desenvainó la Katana me puse en medio de los dos
- Padre por favor, antes escuchame- Papá bajo el arma y asintió
-Yoshimaya-San, espere a fuera por favor- Ryūjin asintió, hizo una reverencia y salió del pequeño salón
- Dime Akiko porque el príncipe dragón vino hasta aquí a pedirme tu mano en matrimonio ¿A caso te tomo a la fuerza?-
-Para nada padre, él ha sido muy respetuoso conmigo- papá suelta un suspiro
- Te lo explicaré todo padre-
Papá se cruzó de brazos y asintió
- Para empezar Izumi mintió, no discutimos, hui porque el me atacó he intento abusar de mi, me defendí rompiéndole un jarrón en la cabeza, al hacerlo el desenvainó su Katana y me hirió- le muestro el inmaculado vendaje
- salí corriendo del palacio y para cuándo me di cuenta ya estaba en el monte Mitake, comenzó a llover y por la gravedad de la herida me desmaye, desperté en el palacio de Yoshiyama-San su madre y el me trataron muy bien y me sentí más segura con el en un día que con Izumi en el último mes…-
-Pero hija mía…-
-Padre me he enamorado de Yoshima Ryūjin- San-
El gesto de papá se suavizo y asintió
- Está bien hija mía arreglaremos esto de la mejor manera- Me brotaron lágrimas de alegría, pero duro poco al escuchar que estaban discutiendo fuera del salón
– Maldito principito pensé que habías muerto cuando mis hombres te atacaron –
-No corres con esa suerte señorito- Papá abrió de golpe las puertas del salón, ambos príncipes voltearon a ver a nuestra dirección
-Querida ven- Izumi me tendió la mano y sentí pánico Ryūjin se dio cuenta y se puso en medio de los dos
– Ni se te ocurra ponerle una mano encima- Ryūjin tenía su mano en el mango de la Katana listo para pelear
– Takashi-
todos voltean y ven a Izumi Daichi dirigiéndose hacia el salón
- ¿Qué significa esto Takashi? -
- Daichi será mejor que hablemos tú yo solos- Papá le abrió las puertas del salón entraron y se encerraron a hablar.
Ryūjin me tomo en sus brazos nos vimos fijamente a los ojos y todo quedó más claro que nunca, debíamos estar juntos.
Estábamos tan absortos uno del otro que no nos dimos cuenta que papá e Izumi habían terminado, el grito de Izumi Takashi nos regresó de golpe al ahora, desenvainó su Katana y nos atacó, Ryūjin esquivo el ataque sólo logró rozarlo, pero hizo que mi herida se abriera de nuevo
- Akiko- papá me sujeto mientras que Izumi Daichi golpeo a su hijo
– Será mejor que nos vayamos y reza a los dioses porque tú tío no nos declare la guerra por tu estupidez- Ellos se fueron en cuestión de minutos.
Ryūjin me tomo de nuevo en sus brazos y me llevó a mis aposentos, papá me acobijo y mis damas se quedaron a cuidar de mi – Yoshiyama-Dono se le han preparado unos aposentos para que se quede está noche, ya mandé a un sirviente pidiéndole a su señora madre que venga para arreglar la boda-
-Muchas gracias Matsuyama-Dono-
A la mañana siguiente despierto agitada, mi vendaje estaba limpio y me di cuenta que ya estaba en mi palacio, llamo a mis sirvientes para que me arreglaran y me sirvieran su desayuno.
Después del desayuno Sali a buscar a papá, pero no estaba en el patio ni en su salón privado
– Matsuyama- Hime- Atsushi viene corriendo hacia mi
- Dime-
-Que bueno que ya esté bien mi señora, su Padre pide que vaya a la entrada principal-
-¿Esperamos alguna visita? -
-Viene la Reyna Dragón Yoshiyama Jin- dejo de respirar y solo pude asentir, me dirige a toda prisa hacia la entrada, pero no me fija por dónde voy y choco con Ryūjin
– Akiko, que bueno que ya estés mejor- solo puede asentir
- Mi… mi padre me esta esperando-
-Oh si lo siento, a mi también me mandó a llamar ¿Sabes quién viene? – Siento como comienzo a sonrojarme
-A si es mi pequeña Akiko mi madre viene para preparar nuestra boda- solo puede asentir
- ¿Qué pasa? ¿No quieres ser mi esposa? -
-No, No es eso, solo pensé que era un sueño- Ryūjin asintio
– Te entiendo- me besa la mano
- Ven que ya nos esperan; verás estoy tan emocionado como tu, por un momento pensé que tú padre se negaría y ya estaba pensando en como escapar contigo
- También yo pensé lo mismo pero el entendió y lo mejor fue nos apoyo- Ryūjin asiento y caminamos en un cómodo silencio hasta la puerta de la entrada principal donde ya esperaba papá.
Se abrieron las puertas lentamente y yo no podía mantenerme quieta
- Respira- me dice Ryūjin en un susurro asentí y los tres vemos como entra la Reyna Dragón montada en su caballo, seguida del sirviente que mandaron y algunos guardias.
Ryūjin se acercó al caballo de su madre y la ayudo a bajar
-Madre, lamento que vinieras tan pronto- le dice besándole la mano
- ¿De verdad lo lamentas hijo mío?-
- La verdad no madre- mostrando una sonrisa de oreja a oreja; papá y yo nos acercamos a saludar
– Yoshiyama-Sama me alegro que pudiera venir tan pronto le avisé-
-Matsuyama-sama descuide se lo impulsivo que es mi hijo- Yoshiyama Jin se acercó a mi.
– Querida, qué bueno ya estés bien-
-Gracias por preocuparse mi señora- Yoshiyama Jin me tomo de las manos
– Tenemos tanto de que hablar y arreglar- solo puede asentir y caminamos juntas
– Lleven esto a los aposentos que se arreglaron para la señora- ordeno, papá y Ryūjin comenzaron a caminar detrás de nosotras a cierta distancia en total silencio
Hija mía sabía que Ryūjin pediría tú mano-
-¿Cómo…? -
-¿Cómo lo supe? asenti
– Verás el me dijo que se enamoraría de la persona que no le temiera a su esencia-
-Ser un Dragón- Yoshiyama Jin asintió
- Tú no huiste cuando viste a ese enorme Dragón, te quedaste a sanar sus heridas, eso y tu belleza cautivaron a mi hijo…- Ryūjin carraspeo
- Madre por favor –
-Será mejor que comencemos con los preparativos- Agregó papá
– Dejen esto en nuestras manos, vayan a dar un paseo-
Ryūjin asintió y me tendió la mano, tomo su mano un poco sonrojada y nos alejamos
-Lamento que mi madre te abrumara-
-Descuida- caminamos en silencio por unos minutos
– Estás muy callada-
-Lo siento, es solo que…-
-Está pasando muy rápido lo sé- asenti, nos dirigimos a un gran patio con un pequeño estanque y unos árboles de Sakura a los lados del camino, la brisa fresca novia nuestras largas cabelleras
-Akiko, yo sé que todo está pasando muy rápido, pero cuando te vi acercarte a mí con asombro sin miedo alguno y luego al quedarte y limpiar mis heridas, me di cuenta que eras diferente eso y tu belleza hicieron que me enamorara de ti- Mi corazon latió con tanta fuerza
– Cuando entré a esa cueva y te vi, me sentí más segura ahí contigo transformado en Dragón que en mi propio palacio aquel día, y me enamoré tanto del Dragón como del humano que cuido de mi- seguimos caminando después de un largo paseo decidimos entrar al palacio, y nos tomamos con nuestros Padres
– Los buscábamos para comer- Los dos asentimos y caminamos detrás de ellos
– Hay detalles que queremos arreglar con ustedes respecto a la boda- entramos a un pequeño comedor.
Nos sentamos juntos y esperamos en silencio a que nuestros padres hablarán
– Queremos saber si les gustaría casarse en primavera, cuando las Sakuras florezcan- solto papá; Ryūjin volteó a verme y al ver que sus ojos brillaron al escuchar esa propuesta, acepto
– Bien, se le mandará una invitación a cada m*****o de nuestras familias- añadió Yoshiyama Jin, Los dos asintieron y así fue como todo empezó.
Comimos en silencio y solo hablaban nuestros padres para saber que les gustaría servir en la boda o los colores.
Después de la comida Yoshiyama Jin y Ryūjin partirían a su Palacio.
-Yoshiyama-Sama espero los arreglos que me comento para complementarlos con los míos
- Tendrá noticias mías en estos días Matsuyama-Sama- papá ayuda a Yoshiyama Jin a subir al caballo y se hace a un lado.