La vida siempre fue cruel conmigo; abandonada en un orfanato a mi suerte con un día de nácida y adoptada dos veces por personas que solo me utilizaron.
Y cuando creí que no podría haber tenido algo peor, eso pasó: la prueba de embarazo dio positivo. Todo por dejarme llevar a cabo una noche con un chico lindo, y no cualquier chico, sino el mismísimo Sebastián Hayes, un poderoso mafioso cinco años mayor que yo.
Sí, la vida y el destino se unieron para arruinar mi existencia.
Sebastian Hayes está hecho para arruinar mi vida ... O tal vez mejorarla.