Eloise Habían pasado dos semanas desde el accidente y el funeral. El ambiente en la empresa seguía siendo pesado, una mezcla de duelo, frustración y desconfianza. Nadie hablaba demasiado del tema, pero todos sabían que lo que había ocurrido no había sido un simple error… alguien dentro había provocado la explosión. A pesar de las pérdidas y los retrasos, no podíamos detenernos. La producción se había visto afectada; sin laboratorio propio, muchos proyectos estaban en pausa. Aun así, trabajábamos sin descanso para cumplir con los plazos y entregar los prototipos robóticos y ensamblajes que mantenían a la compañía a flote. Alessandro fue, sin duda, mi mayor apoyo en esas semanas. No solo me ayudaba con la investigación, sino que abrió un espacio en su propio laboratorio para que pudiér

