Sentado en el mismo sofá en el cual había estado desde que entró en el departamento de Roniel, Maison contemplaba a su pareja discutir por teléfono con su mánager, en lo que ya llevaba sus buenos minutos. Como no parecía que fuera a terminar pronto, se levantó, consiguiendo que este inmediatamente le observara.
—Usaré el baño —anunció.
Roniel asintió y se alejó para seguir hablando con Monika.
Con ese extraño presentimiento siguiéndole, Maison se dirigió al baño de invitados que estaba entre la sala de estar y el comedor.
Cerrando la puerta detrás de él, Maison observó su reflejo en el espejo y luego sacó su celular del bolsillo trasero de su pantalón. La tentación de encenderlo y buscar aquellas fotos que preocuparon tanto Roniel picó en él.
¿Qué clase de video había grabado con Cia
