Estoy en el frente de mi casa, esta lloviendo muchísimo, tanto que mi casa se esta inundando. Estoy leyendo un libro llamado El décimo caso, que está bien bueno, cuando veo una sombra acercarse, me quedo mirándolo fijamente, es de noche así que casi no puedo ver quien es, se está acercando y siento un escalofrío recoger mi columna, cuando está frente a mi, y le da la luz veo que es Isaias con los ojos rojos como el rubí, cuando abrió la boca para hablar, solo pude escuchar un: TE NECESITO...
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Me despierto totalmente sudada, que me querrá decir eso sueño. Según mi abuela yo tengo el don de mi bisabuela, que es que los sueños que tengo, tienen que ver con cosas que van a pasar. Osea que si me sueño con carne, calaveras o sangre, es que alguien va a morir, y si es con niños es que alguien está embarazada, pero este aun no logro entenderlo, por que el tenia los ojos rojos, y por que lloviendo, no lo entiendo.
Son las 5:59 de la mañana y no tengo sueño, así que decido prepararme algo de comer, soñar con él me dio hambre, no lo mal interpreten e, aunque pensándolo bien.... No olvidemos eso. Es sábado no tengo clases y en vez de dormir y levantarme a medio día, estoy despierta comiendo, que vida tengo.
"Horas mas tarde"
- MAMIIIII- grito desde el baño- PASAME UNA VELA QUE SE FUE LA LUZ-
- YA VOY- grita ella también, así nos amamos. Ella me lleva una vela y yo sigo cantando en mi baño.
Cojo mi celular y veo un mensaje de Isaias que dice: oye te tengo una buena noticia.
- ¿Cual es?- pongo yo de inmediato, ahora esperar que llegue la luz para... Yipi ya llego, ahora contestarme maldito, y como en 5 minutos recibo su mensaje. Salgo del baño, me envuelvo en la toalla y salgo a la habitación a ponerme ropa. Ya que mi linda madre nos va a llevar a comer a un restaurante cerda de la casa. Por si no saben que es Mofongo, es uno de los platos típico del país, consta en plátanos fritos majados con chicharrón y queso rallado por encima, una verdadera delicia.
- La noticia es que me voy a mudar cerca de tu casa- estuvo buena la broma, casi caigo pendejo.
- Esto es una broma muy pesada verdad- le digo yo, por que es algo prácticamente imposible.
- No, no estoy bromeando, es enserio, mi mamá y mi tía estaban buscando una casa lejos y bueno la encontraron por una capilla(una iglesia pequeña) y me dijo que te vio entrando a una casa.- Ah ya todo esta tomando sentido.
- Espera, se mudaran en la casa de al lado, hay que chulo, seremos vecinos- digo yo un poco emocionada, y a la vez no por mi madre, seguro querrá castrarlo.
- Si, así podremos quitarnos estas ganas, que tanto nos agobian- hay dios, que voy hacer con este niño.
- ¿ Y cuando se mudaran?- Tengo curiosidad de saber, ya quiero tenerlo de vecino, no para cosas malas, o eso creo.
- Pasado mañana, ya quiero comerte chiquita-Uy esto se esta poniendo caliente.
- Yo también quiero comerte- bueno digamos que hablamos así de sucio, en realidad siempre lo hemos hecho, pero ahora más que nunca. Solo somos amigos..... Con ganas de coger bien duro, nada del otro mundo, ¿verdad?
- Isa, hablamos después voy a salir con mi mamá y con James-
- Está bien, cuidate para alla, vaya un tipo y te viole- jajajajaja si como no.
- Lo que digas, hasta pronto marica-
-Que no soy marica mujer- me encanta molestarlo, toda una vida, desde que nos conocemos siempre lo e jodido, a veces pienso que me debe de tener algún odio guardado.
Me termino de preparar y nos vamos al restaurante, tengo un hambre que podría comerme tres elefantes y aún tenerla. Si lo se, como mucho.