Amores poderosos

No te preocupa

Darier ofreció su brazo a Alisson, y ambos platicaban, se dirigieron al despacho de Alessandro, pues Darier también iba a verlo.

Al llegar a la puerta el guardia los anunció, Alex se levantó de su asiento para ir a saludar a Darier.

- Mi amigo Darier, cuanto tiempo de no vernos, como has estado.

- Bien Alessandro, como ha estado todo por aquí, supe que tu padre te dejo a Cargo de todo.

- Si ya lo sabes, son iguales quieren que sepamos manejar todo, bueno que se le va a hacer es lo que hay.

- Tienes razón.

- Pero dime que te trae por aquí.

- En primer lugar, venir a saludarlos, me gustaría ver a August antes de irme, en segunda vengo a invitar a Alisson a un lugar que me prometió me llevaría, lo recuerdas Ali?

- Oh si tienes razón, nunca pude llevarte, es verdad.

- Y por último a invitarlos a un baile que mis padres han organizado, será una lástima que tus padres no estén, a mi madre le hacía ilusión ver a tu madre. ¿Cuándo volverán los Reyes amigo?

- pues aún falta para su regreso, ¿Cuándo será el baile?

- La próxima semana Alex.

- No, lamentablemente no estarán de regreso aún. Pero con gusto iremos en su nombre.

- Me parece perfecto, espero poder bailar con la Joven más bella del Reino.

Darier veía a Alisson, él parecía estar coqueteando con ella, así que Alessandro lo reprimió.

- Controla tus impulsos, no quiero tener que acabar con ti vida por coquetear con mi gemela.

- Ha, ha, ha hay cosas que no cambian, sigues igual de celoso.

- Claro ya lo sabes, Ali no se casará jamás, menos ahora, pues si mi padre sabe que le permití tener algún pretendiente estaré en problemas.

Desde el rincón del despacho, Jason veía con mirada asesina a Darier, pues lo vio llegar del brazo de Alisson, ella al darse cuenta quiso molestarlo aún más. Lo tomó de la mano y le dijo.

- Vamos Darier te llevaré al lugar del que te conté, te va a gustar mucho. Nos vemos luego hermano.

- Cuidado, Darier tú me respondes por ella, entendido?

- Si amigo la traeré de vuelta pronto, nos vemos después.

Jason no pudo evitar su molestia y reprimió a Alessandro.

- Pero tú de que vas, por que la dejas irse así con ese. No te preocupa.

- Valla te escuchaste como mi padre Jason, pero Darier es amigo de la familia, él es como un hermano para nosotros, la protegería con su vida de ser necesario.

- No estoy tan seguro de eso, me parece que eres muy confiado, no se supone que la dejaron a tu cargo.

- Sabes Jason, creo que eres aún más celoso, que yo, sé que quieres a Alisson, como una hermana, pero ella estar a bien, ya te mostró que puede cuidar de sí misma.

Jason sabía que si seguía, Alessandro sospecharía que él estaba enamorado de ella, así que mejor lo dejo, aunque por dentro sentía que se moría por los celos.

Alisson llevo a Darier a la repostería favorita de su madre, ahí servían los postres más deliciosos del Reino, ambos pidieron varios y té. Alisson amaba charlar con Darier, él era tan divertido, bromeaban juntos, él no hacia diferencia por que Ali fuera una princesa, él la trataba como lo que era su amiga, pero Darier estaba interesado en ella, él siempre escuchaba a su padre molestar a el padre de Alisson, Gabriel le decía a Alejandro que sus hijos se casarían algún día.

Y ahora él estaba ahí enamorado de Alisson, ella era muy divertida, él amaba conversar con ella, no era como las demás jóvenes que solo hablaban de bailes, fiestas de té, compras. Eran tan aburridas.

- Ali yo quiero decirte algo tienes quien te lleve al baile, yo podría ir contigo.

- Si sería bueno, dos buenos amigos, será divertido no lo crees.

Alisson no había comprendido por donde iba Darier, pero él no quiso apresurarse, y lo haría lento, pues aún faltaba lo más difícil, hablar con el Rey y el príncipe, y sabía que tal vez perdería la vida en el intento.

Pero su padre siempre lo había animado, sin un día se decidía por Ali, él lo acompañaría a convencer al Rey, Alejandro era un buen hombre, pero tratándose de Alisson el se convertía en un demonio, protegía a su niña como fuese.

- Pero dime, hay alguna joven que te interese, ya tienes alguna pretendida, contaos.

- No, la verdad hay una joven que me interesa, pero creo que todavía no es tiempo de confesarme, debo ir poco a poco.

- Quien es la conozco, dime.

Darier le mintió, le dijo que no la conocía, pero ella era la joven que él quería hacer su esposa algún día.

- Deberías de armarte de valor y confesárselo, quizá a ella también le gustes, mírate eres muy guapo, bien parecido, vienes de buena familia, cualquiera agradecería estar a tu lado.

Y Alisson tomó su mano, como si le brindará su apoyo.

- Gracias Ali, tu siempre has sido una buena amiga.

- Lo se, soy adorable.

Y ambos comenzaron a reír, se la pasaban de lo mejor juntos, Alisson quería mucho a Darier, y él a ella, de niños siempre andaban juntos, en una ocasión Alisson estaba trepando a un árbol, al igual que Darier, al intentar bajar, él sintió un poco de miedo y estuvo a punto de caer, ella lo tranquilizó, siempre supo como hacerlo sentir bien, Ali era una niña que siempre se preocupó por los demás, sin saberlo, ella hacía que Darier se sintiera feliz, a su lado se la pasaba bien, no quería separarse de ella, nunca.

Darier la llevo al castillo, él la ayudo a bajar del carruaje, en ese momento apareció Jason, el estaba en la entrada del castillo.

- Mi querida Ali, ha llegado a su hogar sana y salva.

- Gracias Darier, hoy fue un día muy agradable, nos vemos pronto.

- Así será, vendré por ti el día del baile, si así lo deseas.

Jason sintió una punzada en el pecho, él la llevaría al baile, ese desgraciado iría con ella, tenía ganas de matarlo.

- Nos vemos Darier.

Y Alisson se comenzó a alejar por la escalinata.