Narra Evangelina Por fin había llegado el fin de semana, específicamente viernes. La despedida y la boda se haría en uno de los hoteles del novio, este estaba cerca de la playa. Dalton pasó por mi por la tarde luego del trabajo, ingresé al auto con una pequeña maleta, se veía muy guapo con ropa informal, disimule un poco para que no me viera mirándolo. Cuando llegamos al hotel, nos dieron nuestras llaves, según Dalton el hotel iba ser poblado exclusivamente para los invitados de la boda. Él me acompaño a la puerta de mi habitación, la suya quedaba en el mismo pasillo. —Ya casi oscurece, vendré por ti en unos minutos para irnos a cenar y luego a la despedida—me dijo cortésmente antes de marcharse. Ingresé y me acomode sobre la cama. En ese momento mi celular comenzó a vibrar. Era un núme

