ꕥABIGAILꕥ Al llegar al aeropuerto, recibí la llamada de Sergey, lo sentí extraño, había bebido licor, estos hombres de hoy en día son unos borrachos sin remedio. Cuando cuelgo la llamada y levanto mi mirada, los ojos de un padre tremendamente enojado me están observando. Camino desganada, porque sé lo que me espera, cuando mi viejo se molesta me va de lo peor, solo tengo que buscar la manera de contentarlo nuevamente. —Hola, papito. —Hablaremos en casa. —Me ayuda con una de las maletas, camino detrás de él como niña regañada, voy preparándome mentalmente para soportar todo lo que tiene que decirme. —Papi… —Me calla de inmediato, tirándome su peor mirada, estoy frita. —Silencio, sube al auto, en la casa dije que hablaríamos. Me subo al auto, y en efecto no me dirigió ni el habla ni la

