Sus cuerpos aún estaban mojados cuando William puso a Aline sobre la cama, rogando por un beso más...uno que ella se resistía a dárselo. Aline tampoco podía mirarlo, no quería ver esos ojos que eran capaces de desarmar todas sus defensas. -Mírame, nena, tú solo mírame.- pidió William acariciando su rostro con mucha delicadeza limpiando sus lágrimas. -¿Recuerdas las palabras que utilicé para pedirte en matrimonio hace años? -preguntó y fue cuando ella abrió los ojos para mirarlo, y asintió reviviendo ese momento en su memoria. -Utilizaste la letra de una canción de Luan Santana, mi canción favorita.- contestó Aline con voz rota. Una sonrisa muy bonita se dibujó en el rostro de William, haciendo contraste con la tristeza de sus ojos. Entonces él repitió la letra de aquella canción que r

