En Problemas
Noah estaba sentado en una de las sillas frente al escritorio del encargado del Centro de Entrenamiento con una bolsa de hielo cerca del ojo. Se rio pensando que acababa de regresar y estaba ahí sentado de nuevo.
Cuando eran luces, siempre terminaba en esa silla por meterse en problemas por defender a Zack. Como ahora...
Los bastardos lo habían rodeado en la sala de lectura, similar a una biblioteca Norm, haciendo comentarios desagradables sobre su hermano por haber tomado a Anthea y haber traicionado a su guía. Cada comentario era injusto y doloroso, pero no podía refutarlo. Zack tenía su propia historia y aún no la conocía por completo.
- ¿Mejor?
La voz de Wen lo sobresaltó cuando la joven entró a su oficina. Vestía el uniforme de esper y Noah la miró sorprendido.
- ¡¿Wen?! - exclamó girándose para mirarla - ¿Dónde está el guía Hill? Tú eres... ¿Tu implante?
- Estoy embarazada...Lo pondrán después de que cumpla el trimestre
- Oh, vaya...Error en el entrenamiento...
- No. - dijo la joven divertida - Tengo un compañero...
- ¿Ese bastardo de Hill te dejó en paz?
- Si...Soy la encargada del Centro ahora, Noah... - le dijo acercándose y revisando las heridas en su rostro. Tenía un golpe feo en el pómulo, la piel de los nudillos rota y el labio partido - ¿En qué estabas pensando?
- Reaccioné sin pensar...Estaban hablando de Zack...
- Zack ya no es tan frágil. Sabe defenderse solo... - le dijo sentándose en la silla junto a él - Trataré de controlar los daños, pero no será fácil. Estás en la unidad de seguridad de Anthea...Todos se enterarán de lo que pasó, si no es que ya se ha corrido la voz...
- La cagué... - suspiró.
- Que bueno que lo reconozcas... - dijo John entrando a la oficina seguido de Seth y Zack y el joven esper se encogió en el asiento. Ya se habían enterado.
- Los dejaré solos para que hablen. - les dijo Wen - Esperaré afuera. Debemos manejarlo rápido o será la comidilla de la Cúpula, Seth.
- Lo entiendo... - le dijo el hombre y esperó a que la esper saliera.
En cuanto la puerta se cerró, Zack caminó hacia su hermano y lo sujetó del uniforme.
- ¡¿Qué mierda estás haciendo?! - le gritó temblando de rabia - ¿Cómo te metes en una pelea con unas luces? Eres un adulto.
- Lo sé, lo sé... ¡Mierda! ¡No estaba pensando! Comenzaron a hablar de ti y no pude dejarlo pasar...
- ¿De mi? - preguntó Zack confundido mirando a Seth y a John.
- Comenzaron a hablar de que traicionaste a tu guía y que tomaste a la G3 que estaba vinculada. Que debían anular tus poderes o matarte...
- Y qué importa lo que hablen...
La voz de Zack se escuchó tan calmada que Noah lo miró perplejo.
- ¿Cómo que qué importa? - preguntó Noah frenético - ¡Están pidiendo anular tus habilidades o matarte! ¿Cómo puedes estar tan tranquilo?
- Porque eso no pasará... - dijo Seth con seriedad - Zack tomó a Anthea porque yo se lo permití.
Los hermanos y John lo miraron boquiabiertos.
- ¡¿Qué estás diciendo, Seth?! - exclamó Zack frenético.
Ya tener que guardar el secreto y mantener esa imagen falsa era complejo, pero escuchar que su propio esper lo había autorizado era una locura.
- ¿Tú lo permitiste? - preguntó Noah en shock. Sólo pensar en que otro esper tocara a Rin lo hacía querer matarlo.
- Zack te explicó que ya no tenía vínculo con Cassis ¿Verdad? - le preguntó Seth y el joven asintió - Anthea fue incomunicada y estaba en riesgo al igual que toda su familia. - miró a John quien asintió - Hablé con Zack para que la protegiera como el guardia designado por Cassis mientras yo trataba de acercarme y si eso implicaba acostarse con ella, lo permitiría. La vida de mi guía era más importante que eso. Además, tu mismo has visto la relación que ambos tienen. De todos los esper que podrían haberla custodiado por órdenes de Storm, él era la mejor opción.
-¿Estás diciendo que estás en paz con que otro esper tome a tu compañera?
- No estoy diciendo eso. Sólo aclaro que lo permití sólo porque era Zack. Es mi amigo y confío en él. Si otro la hubiese tocado, lo habría matado sin dudar. - el joven lo observó, conmovido.
- Las redes decían que estaba embarazada. - murmuró angustiado.
Seth se acercó a Noah.
- Si Rin y tu bebé estuvieran en peligro y eso fuese lo único que podía suceder para impedir que otros bastardos la tocaran o le hicieran daño al no poder protegerla ¿Lo impedirías?
- Lo que estaba pasando era más grande de lo que la comunidad sabe. - agregó John - Cassis quería muerta a Anthea y sólo hicimos lo necesario para protegerla. Estamos en paz con nuestras decisiones. Todos.
- No lo sabía... - dijo Noah avergonzado.
- Pero ahora lo sabes y no quiero que vuelvas a defenderme por algo que no importa. - le dijo Zack - La gente siempre hablará ¿Crees que no hablaban de mi antes? Ya te lo he dicho. Hice cosas de las que no me enorgullezco y soy peligroso...Cassis me hizo así y tengo que vivir con ello.
- ¡Pero ese bastardo está muerto! - exclamó Noah - ¿Por qué tienes que seguir pasando por todo esto? ¿Cómo no puede importarte?
- Porque Anthea, Seth y los demás están a mi lado. No estoy solo... Cualquier cosa que pase, ellos están conmigo y ahora para ti también. Me costó mucho confiar en la gente después de que te fuiste o tal vez desde antes, pero ellos me han demostrado que puedo vivir mi vida fuera de la sombra de Cassis. Prefiero mil veces que me asocien a Anthea por haberla tomado que a ese bastardo que casi me destruyó.
- Ahora formas parte de la unidad de Anthea y eres familia cómo lo es Zack. - dijo Seth decidido - Sé que no estás acostumbrado a Anthea o a mi, pero te aseguro que enfrentarás cosas más complejas que los comentarios de unos jóvenes inmaduros.
- Las habilidades de Anthea son incluso mayores que las de Cassis.- agregó Zack - Muchas veces ve y hace cosas que no entiendo, pero te prometo que todo lo que hace es para y por nosotros y la comunidad ¿Por qué crees que acepté entrenar contigo y aceptar a Rin como mi guía?
- ¿?
- Porque ella conoce mi oscuridad mejor que yo y cree que ustedes deben estar conmigo y que debo darles la oportunidad. Aunque todo mi cuerpo y mi razón diga que me aleje, no puedo hacerlo porque ella cree en mi, en nosotros.- se rio con suavidad - Esa guía es una espina en el trasero cuando quiere algo, pero la seguiré sin dudar. Deberías confiar en ella si no puedes confiar en mi.
- No es eso hermano...
- No necesito que me protejas. Necesito que confíes en mi, escuches lo que escuches. La gente siempre hablará y no puedo estar pendiente de que reacciones a todo. No nos hace bien ni a mí ni a ustedes. - se giró para mirar a Seth - Encárguense de él. Voy a salir.
Zack caminó hacia la salida, pero se quedó quieto cuando una voz desde afuera le habló.
- ¿A dónde crees que vas?
- Ah, maldición. Estamos jodidos - maldijo bajo cuando Anthea entró a la sala de espera seguida de Rin y Jasper.
Los ocho metahumanos y Wen estaban en el lugar, acompañados por guardias de seguridad interna que inclinaron la cabeza en señal de respeto.