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Pov: Paola ╚═══════ - ═══.✵.═╝
Al despertar no sabía cuanto tiempo llevaba dormida, pero algo es seguro ya no me encontraba en mi cómodo sitio si no en los brazos de alguno de los chicos, quien fuera que fuera tenía sus brazos entre mi espalda y el otro sosteniendo me del pañal lo cual hizo que me sonrojara y aun más notando que aun tenía aquel chupon que había recogido de aquella mesita que se encontraba en la guarderia.
Mientras hiba despertando siendo un poco más conciente de mi entorno pude notar que era Felipe el que me tenía en sus brazos, y al parecer estaba hablando con alguien, era otro chico pero no distinguía su voz, era súper Obvio que de Daniel no se trataba.
-Ahora que es pequeña te recomiendo que la acostumbres a la leche de recién nacido, ya que tiene más proteínas y es más Rica en calcio- decía aquella voz extraña
- Si, de echo de esa le damos, pero le ponemos un poco de azúcar para que se la tome mejor.
-Ya, veo. ¿Y que tipo de pañales usa?
-oh... De hecho no hemos comenzado con los pañales, no queremos incluirlos aun en su rutina, apenas hoy vamos a empezar a incluirlos de a poco
-Ya veo... ¿Y la comida que tal?
-Pues le damos cosas sólidas, solo en algunos casos papillas, ella nos a dicho que prefiere comer sólido, no es nada quisquillosa al Contrario, le gustan mucho las verduras y siempre se come todo su plato, hay veces donde hasta pide más.
-O que bueno, a mark no le gustan las verduras y batallamos mucho a que las coma. ¿Oye y cada que le das leche?.
- oh, toma un biberón de 400ml dos veces al día, aveces tres, a la hora de la siesta y cuando va a dormir.
- oh pues te recomiendo que le pongan una hora exacta durante el día para darle una mamila más, tal vez como merienda o simplemente para incrementar su ingesta ya que dijiste que va muy pocas veces al baño.
Me moví un poco para intentar sentarme y bajar de los brazos de Felipe pero al sentir mi movimiento habló.
-oh mira parece que ya desperto- dijo mientras me sentaba en sus piernas y peinaba un poco mi cabello.
-Hola muñequita, ven a saludar a tu tío Quique- dijo aquel extraño mientras estiraba sus brazos y Felipe me pasaba a los suyos.- Es muy linda Feli, se ve hermosa con este conjuntito, espero que te sirvan los tips que te acabo de dar, no será tan difícil lidiar con esta princesita- dijo mientras me rebotaba y dejaba besos en mi cachete.
- Vamos a reunir a todos para que la vean ya que desperto- decía Felipe mientras se ponía de pie.
El tal Quique hizo lo mismo, pero yo no quería estar con ninguno de ellos dos así que busque a Daniel con la mirada, al no encontrarlo mis ojos comenzaron a picar debido a las lágrimas retenidas, me sentía humillada y necesitaba estar en mi lugar seguro el cual era su cuello.
No me di cuenta el momento en el que entramos nuevamente a la casa, donde alfin pude ver lo que necesitaba. Daniel se encontraba conversando en la Sala con un grupo de extraños eran tres hombres y una mujer, junto a ellos habían dos "niños" jugando con algunos de mis juguetes sentados en un tapete
-Ya despertó- anuncio Felipe haciendo que me pusiera nerviosa. Todos los adultos se levantaron hacia mi y comenzaron a alagarme diciendo que era muy bonita entre otras cosas pero yo solo esperaba y rogaba a que todo esto terminara. Localice a Daniel con la mirada e hice contacto visual con el, tratando de pedir ayuda.
El entendió rápidamente y se levantó de su asiento dirigiéndose a mi,
-Enrique puedes prestarme un momento a mi niña, parece que esta asustada- le dijo suavemente a aquel hombre que me tenía cargada.
El hombre llamado Enrique asintió y me paso a los brazos de Daniel, los cuales me aferre como si fuera de vida o muerte. Lo cual hizo que todos los presentes por alguna extraña razón murieran de ternura, muy probablemente lo era por el body que llevaba y la acción que acababa de hacer.
-Mira corazón ellos son María y Luca, son los padres de Sofía, y los que nos hicieron entrar a este mundo- dijo Daniel acercándome a una mujer alta y delgada junto con un hombre bastante alto casi del mismo tamaño que Daniel.
-Hola muñequita- dijeron ambos adultos casi al mismo tiempo mientras extendían sus manos en señal de apretón, les correspondí el saludo presentándome a mi misma.
-H-hola mi n-nombre es Paola u-un gusto- tartamudee un poco al estar tan nerviosa a lo cual ambos mayores me miraron con un gesto que solo reflejaba ternura. -No tienes por que tratarnos formalmente nena, nosotros somos muy cercanos a tus papis, consideramos tus tios- dijo la tal María con una sonrisa en su rostro, asenti y volví a acurrucarme en el pecho de Daniel pero este me rebotó un poco y se aproximó a otra pareja.
- Ellos son Camilo y Thomas corazón- dijo presentando a una pareja de dos hombres uno el cual era Camilo, tenía el cabello rizado, tez Morena pero no lo suficiente, y tenía pecas por casi toda su cara, era alto pero no tanto como Daniel, más bien creo que mide lo que Felipe, bueno talvez un poco más alto. -Hola preciosa- dijo Camilo estirando su mano en señal de saludo, lo correspondí y nuevamente me presenté. Seguido de el un hombre alto e imponente repitió el mismo gesto, ese debía ser Thomas, el era alto, tal vez unos cuantos centímetros más que Daniel, incluso era más robusto, su cabello era lacio y n***o, se veía serio lo cual me asustó un poco. Le devolví el saludo y nuevamente me acomode en el pecho de Daniel, sin embargo nuevamente hizo que me levantara y saludarla a otra pareja.
-Bueno supongo que ya conociste a Enrique, el es su esposo Ernesto, ellos son padres de Mark- dijo acercando me nuevamente a otra pareja, Enrique era alto y Delgado, talvez media más que Felipe era azabache y su tez era clara, Ernesto era apenas unos cuantos centímetros más grande y era pelinegro pero no más que su esposo, también era Delgado pero a diferencia de su esposo el era un poco más robusto.
-Hola pequeñita- dijo Ernesto estirando su mano al igual que el resto. Le correspondi el saludo y nuevamente recargue mi cabeza en el pecho de Daniel, sin duda amo estar ahí, es mi lugar seguro me siento protegida y reconfortada.
-¿Nena, no quieres ir a jugar con Mark y Sofía?- pregunto Daniel rebotando me un poco en sus brazos.
Negué con la cabeza y dirigi mi mano a mi boca donde comencé a mordisquear la uña de mi dedo gordo en un intento de relajarme. -No hagas eso Pao, tus manitas están sucias- dijo mientras apartaba mi mano de mi boca. -¿por que no quieres ir a jugar nena?-volvió a preguntar.
-Quiero estar contigo- balbusee bajito, si no fuera por que estaba casi que pegada a su oreja, creo que no me hubiera escuchado.
Daniel asintió y se sentó nuevamente en el sofá conmigo en brazos.
-¿No quieres ir a jugar princesa?- pregunto María dulcemente.
Negué con mi cabeza y reforze mi agarre hacia Daniel.
Debieron de haber pasado unos 10min. Yo era una persona paciente y no me aburría con facilidad, pero al ver a aquellos dos niños me tentada mucho a ir con ellos, sin embargo tenía miedo. Desde hace mucho tiempo me cuesta hablar con los extraños y hacer amigos, cuando me abro a las personas siempre término lastimada, así que prefiero simplemente no hacerlo.
-Corazón por que no vas y le enseñas tu guardería a Mark y Sofía mientras nosotros les preparamos algo, ¿no has comido verdad?,- dijo Felipe tratando de zafar me de Daniel.
Pero yo me aferre a el y solté un pequeño quejido no me quería separar de el, estaba muy comoda.
-Ok ok, parece que alguien no quiere separarse de su daddy- dijo en voz alta provocando un sonrojo en mi.
Estaba siendo súper dependiente e infantil frente a muchas personas.
Ante tal insinuación extendi mis brazos hacia Felipe, tratando de no decir que estaba de acuerdo con el.
Felipe me cargo y pidió ayuda a Luca y Enrique, los cuales eran los "padres" de Sofía y Mark.
Ambos adultos fueron por sus hijos y los llevaron de la mano, mientras que Felipe no se veía con las mismas intenciones.
Llegamos a la habitación donde estaba la guardería y por fin Felipe me puso en el suelo. Aun tenía las rodilleras así que no tuvo que ponerme otras, únicamente me recordó que no caminara.- Recuerda las reglas nena, si necesitan algo no duden en decirnos lo, - aviso y salió de la habitación junto con el otro par de adultos.
Comencé a ponerme nerviosa, estaba sola con dos niños obligada a socializar, tengo miedo de lo que pueda pasar, tal vez no les agrade y me acusen de algo que no hice y los chicos se decepciónen de mi y...
-Hola, como te llamas- dijo la tal Sofía interrumpiendo mis pensamiento mientras se acercaba más a mi.
-P-paola- conteste bajito y sin mirarla.
-Yo soy Sofía y ese tonto que esta ahí es Mark- hablaba rápido y con confianza todo lo contrario a mi, creo que me agrada.
-L-lo se, Daniel me lo dijo- conteste haciendo un poco de contacto visual con ella. Sofía era rubia y de tez clara, se veía más alta que yo pero no se por cuanto, traia un conjunto parecido al mío, pero el de ella en ves de decir "daddy is my Valentine" decia "quieres ser mi Valentín", y en vez de tener un cubre pañal, tenía una falda de tul Roja con brillitos. Su cabello era adornado con un moño por la parte de atrás, y a diferencia del mío, se veía bastante sedoso y largo.
-Oigan no me ignoren- dijo Mark desde atrás de nosotros. El tenía un cabello castaño y un poco largo, sus ojos eran verdes y sus rasgos eran bastante infantiles.
- Hay que jugar a la cocinita- dijo Sofía animadamente mientras se dirigía hacia ella.
-No eso es para niñas- protestó Mark cruzando los brazos y haciendo un pequeño puchero.
-Nada es para niñas o niños, las cosas no tienen genero, además hay chefs muy reconocidos que son hombres- conteste un poco indignada por su comentario.
-Esta bien esta bien, hay que jugar a la apestosa cocinita- Resignado se acerco a ella y comenzo a buscar por los cajones de tela que estaban a un lado de ella, de ahí saco un delantal blanco. - Yo seré el chef- dijo mientras se colocaba el delantal.
-Yo quiero ser comensal- Grito Sofía mientras daba pequeños saltos de alegría,
-¿Entonces yo que seré?- pregunte tímidamente.
-Ven, tu puedes ayudarme con la cocina- dijo Mark haciéndome una seña con la mano. Asenti y gatee hacia el, al llegar me miro un poco sorprendido.
-¿Por que no caminas?- pregunto.
-Pues... Los chicos me dijeron que no podía caminar, por eso me pusieron estas cosas- respondi señalando las rodilleras.
-Pero ellos no están aqui- Mark me dio su mano en señal de ayuda para poder levantarme. Dudé por unos segundos pero al final cedi.
Pasamos jugando por lo menos dos horas hasta que apareció Daniel con los adultos que antes vinieron a dejar a Mark y Sofía.
Todos tomaron a su respectivo hijo y salimos de la habitación.
-¿A donde vamos?- Le pregunte a Daniel mientras nos dirigíamos a la cocina.
- a comer nena, tu papi te preparó algo ya que no has comido en todo el dia-
-Pero no tengo hambre Daniel- dije en un intento de volver a jugar con mis nuevos amigos.
En ese momento mi estómago me traicionó y comenzo a rugir exigiendo comida.
-Te creo princesa, pero al monstruo que esta ahí dentro no- comenzo a picar mi Panza haciendo que Riera un poco debido a las cosquillas.
Al llegar a la cocina había tres platos pequeños de colores con lo que parecía ser papilla.
Suspire resignada mientras Daniel se sentaba en un banquillo conmigo en su regazo.
Felipe le pasó un plato junto con una cuchara de plástico. Tomó un poco con esa misma y la acercó a mi boca.
Lo mire por un instante dudosa pero finalmente me resigne y la abri.
Voltee a otro lado viendo el mismo escenario con Sofía y Mark. Pero a ellos les daban sus dos padres mientras que a mi solo me alimentaba Daniel.
...
-Solo será una hora más Sofía ya casi nos vamos.
-Lo mismo para ti Mark recuerda que hoy te toca baño- dijeron Ernesto y Luca mientras dejaban nuevamente a Sofía y Mark en el tapete de el Salón de juegos.
-¿Tienes libros para colorear?- pregunto Mark mientras se acercaba a un estante con libros.
Asenti y camine hacia en mueble de donde había sacado el libro de colorear de la mañana.
Mark escogió uno de Paw patrol mientras que Sofía uno de princesas, a mi no le llamó la atención ninguno de esos libros así que me dirigí hacia donde había dejado el anterior.
Re busque entre los cojines y mantas de aquel nido donde había tomado mi siesta hasta encontrar con el libro que había dejado, junto con los colores.
Los chicos y yo nos sentamos en la mesa y comenzamos a colorear mientras conversamos.
-Cuanto tiempo llevan en esto- pregunte
-Pues con María y Luca llevó cinco años y en el ABDL llevó casi tres- contestó Sofía
-Yo con Enrique y Ernesto llevó tres años y en el ABDL casi dos- siguió Mark
-Wow llevan mucho, yo con los chicos llevó dos semanas y en esto no llevó ni una- dije un poco cabizbaja. -Y... Como conocieron a sus padres- Volvi a preguntar.
-Pues... Yo los conocí a los 14 años, estaba pasando una época de rebeldía y mis padres biológicos me maltrataban, ellos me sacaron de ese entorno tóxico, pero al ver que seguia rebelde incluso con ellos, decidieron reeducarme - Contestó Sofía con un sonrojo en su cara.
- Mi caso es similar. Mis padres eran alcohólicos y me hacían trabajar en la calle, un día trate de robar la cartera de un hombre, el cual era Enrique y así nos conocimos, a pesar de intentar robarle me comprendió y ellos me adoptaron. Un año después me propusieron lo del ABDL para poder vivir la infancia que nunca pude tener- dijo ahora Mark concentrado en no salirse de la línea de su dibujo.
-oh ya veo. Pues a mi no me maltrataban, pero el ambiente de mi casa si era tóxico. Casi toda mi familia me ignoraba y hacia menos. Mi madre me hizo trabajar para ganar más dinero y salir de deudas. Y mi padre se cambió de trabajo, ahí fue cuando conocí a Daniel. Pasaron muchas cosas y luego conocí a Felipe. Al poco tiempo ellos me adoptaron... La verdad no me se todos los detalles-
...
-Mami todavía no me quiero ir- dijo Sofía mientras un bostezo salía de su boca.
- Lo se nena, pero ya casi es tu hora de dormir y todavía tienes que hacer unas cosas llegando a casa- Contestó María mientras acomodaba a Sofía en su cadera y Luca la tapaba con una manta.
-Dile adiós a Paola mi amor- dijo Luca antes de taparle por completo.
-Bay Pau, espero verte pronto- dijo despidiéndose con su manita.
-Adiós sofi, le diré a mis papis si me dejan- conteste repitiendo el mismo gesto
-También tu jovencito, no te salvas de la bañera.- dijo Ernesto haciendo la misma acción con Mark el cual solo hizo un puchero.
-Despidete de tus tíos y de Paola dijo Enrique antes de cobijar a Mark como lo hizo Luca.
-Bay tío Felipe, bay tío Dani. Bay paupau- dijo despidiéndose con su mano.
-bay mark me divertí mucho- conteste con una sonrisa. Daniel acompaño a las dos parejas a la puerta mientras que Felipe me tomaba por debajo de los hombros.
Me lanzo en el aire y me atrapó varias veces mientras dejaba besos por toda mi cara. Provocando una fuerte carcajada de mi parte.
Daniel apareció de nuevo y me arrebató de los brazos de Felipe me abrazo fuertemente y plantó miles de besos en mi cabeza.
-Daniel me aplastas- dije sonriendo.
-Lo siento mi nena, es que me puso... Nos puso muy feliz que nos llamaras asi- Ahí fue cuando me di cuenta de lo que había dicho antes, me sonroje potentemente y escondí mi cara en el pecho de Daniel.
-Bueno, vamos a darte un baño de tanto jugar debes estar sucia- nuevamente Felipe me arrebató de los brazos de Daniel y comenzó a levantarme en el aire.
Los tres subimos escalones arriba y entramos a mi habitación, Daniel se dirigió al closet y saco un mameluco blanco con puntos rosas y un especie de oso en los pies. El conjunto venía con un gorro y un babero pero dudo que me lo pongan.
Felipe comenzo a quitarme la ropa que tenía junto con el pañal.
Tomó una toalla y me envolvió con ella. Nos dirigimos al baño donde esperamos a Daniel.
Cuando entró Felipe me paso a sus brazos y comenzo a llenar la bañera.
Término y Daniel comenzo a desenvolver me seguido de esto cuidadosamente me puso dentro de la bañera.
Felipe me pidió que escogiera una bomba de baño de la cesta y señale una amarilla, la saco de su empaque y la tiro al agua. Este es mi momento favorito del día, el baño de la noche es muchísimo más relajante que el de la mañana, las bombas de baño tienen olores relajantes y los chicos me dan masajes para relajarme y dormir más rápido.
-Nena vamos a empezar a incluir los pañales desde hoy- dijo Felipe mientras tallaba mi cabeza.
Me tense al escuchar eso, aun no quería usar los.
-Por ahora solo usaras pull ups, en lo que te acostumbras pero después comenzaras a usar normales.
Asenti cabizbaja y me concentre en las burbujas que estaban en la tina
...
El baño término. Me encuentro en el regazo de Daniel esperando mi mamila.
-Hoy te portaste de maravilla princesa, mereces un premio- dijo mientras me mecia y daba palmadas en el pull ups.
Me sonroje al sentirlas pero ala vez eran relajantes.
Felipe aparecio con el biberón y me lo entregó, lo acerque a mi boca y comencé a beberlo, como si ya fuera costumbre a los cinco minutos mis ojos comenzaron a pesar y lentamente empece a cerrarlos.