Katherine tosió desesperadamente, sintiendo como si se le fueran a salir los pulmones, antes de recuperarse por fin. ¿Qué quería decir con esa pregunta? ¿No fue Anthony quien la encarceló y humilló? ¿Cómo podía hacer semejante pregunta? —He dicho que quiero que mi padre esté a salvo. Katherine sacó fuerzas de alguna parte y levantó obstinadamente los ojos para encontrarse con los de Anthony. —¡Si no, no aceptaré el divorcio! —Estás dispuesta a hacer cualquier cosa para salvarlo. Anthony hizo una mueca, como si hubiera oído un chiste. Por supuesto, Katherine estaba dispuesta a todo. Ahora estaba maltrecha y no le quedaba nada, salvo su padre, que estaba encarcelado. Todo ello gracias a Anthony, pero aún así le rogó que perdonara la vida a su padre. —Si quieres que esté a salvo, no

