En la camioneta íbamos Federico y yo en el asiento trasero y dos escoltas adelante. ᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠ Federico ni me miró cuando entré al auto por estar viendo su celular, sin embargo, lo saludé como siempre lo hacía y me ignoró como siempre. No pude evitar sentirme nerviosa y con miedo, pues, si a Federico se le ocurría matarme aquí mismo, no estaría Ian para salvarme, solo me quedaba rezar por mi vida. ᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠᅠ Miré dos veces hacia atrás, en busca de la camioneta en la que iba Ian y gracias al cielo estuvo todo el tiempo atrás, para mí era suficiente para sentirme más segura. La camioneta se estacionó en la entrada de una casa que tenía fachada de cualquier cosa menos de bar, me alarmé al pensar que en realidad no me iba a llevar a ninguna inauguración, sino que irí

