NARRA JAINA:
Cuando llego al aeropuerto de Londres me esta esperando el chofer del hotel al que me hospedare con un cartel en su mano donde tiene garabateado mi nombre, me acerco a el para informarle de mi llegada.
El hombre se encarga de mi equipaje mientras yo contesto una llamada de la galería, mientras observo como guarda mis maletas. Soy desconfiada, sobre todo con gente que no conozco, aunque en este hotel son conocidos por su estricto proceder con sus empleados haciendo que el descontentó de sus huéspedes sea casi nulo.
_hola Darla, acabo de llegar estoy en el aeropuerto rumbo a mi hotel, en que puedo serte útil?
_hola Jaina, solo quería confirmar de tu arribo.
_Bueno ya lo sabes, en una hora pasare por la galería, quiero empezar con mi tarea. Tenme preparado la lista de artistas con la que cuanta la galería por favor.
_Ya esta lista, quiere que te la pase por mail así tienes mas tiempo para descansar?
_no te preocupes, estaré ahí en una hora.
Luego de colgar cuando estaba por subirme al fin a mi coche de traslado vi salir al chico ojos de jade junto a una chica de mi casi estatura hablando entre risas, la ayudo a subir en el taxi que había aparcado junto a la acera y cuando se disponía a tomar su lugar alzando la vista me ve observándolo para saludarme con la mano al mismo tiempo que desaparecía dentro del automóvil. Me quede como una idiota parada con un pie dentro del coche y otro en el cordón de la calle, al percatarme de mi desconsiento reacciono y termino de ubicarme en el asiento y así partir hasta el hotel.
El viaje era largo por lo que me acomode y colocando los auriculares en mis oídos le di play a la hermosa música de L.P. pero eso no vasto para apartar de mi mente la sonrisa de aquel tipo. Seguro que es un machista mujeriego sin retorno, saludarme estando de la mano con su novia, esposa o lo que sea, es muy desconsiderado de su parte.
Ya en el hotel, un valet se ocupo de llevar mi equipaje hasta mi habitación mientras terminaba de firmar unos papeles en recepción. Al subir y comprobar lo hermosa y acogedora que era la habitación, me dispuse a buscar entre mis maletas la ropa que me pondría para asistir a la galería. Quería dar una buena impresión. Me decidí por un traje sencillo pero que decía acá mando yo con unos tacones a juego.
Al entrar al baño me quede sin aliento al ver la tina tan reconfortante y que sin duda iba a disfrutar, sin esperar un segundo mas abrí las canillas para que se llenara y mirando sobre la encimera distintos frascos de sales aromáticas me decidí por mi favorita, rosas, y vertí un poco de su contenido en la bañera. Cuando ya estuvo lista me deslice dentro de esta para relajarme un momento y disfrutar del agua.
Y como siempre pasa me dormí, desperté tiritando ya que el agua se había enfriado. Salgo casi al trote de la tina y me envuelvo con una toalla para dirigirme a la habitación y tomando mi celular veo q a pasado media hora. El apuro entra en mi sistema y como una bala comienzo a vestirme, seco mi cabello a toda prisa y me perfumo generosamente con mi perfume de rosas. Amo las rosas. Al terminar de colocarme mis zapatos tomo mi bolso y bajo a recepción donde me informan que el coche que había pedido con anticipación ya se encuentra esperándome en el anden. Salgo y subo al auto y mientras va marchando aprovecho para maquillarme un poco que en el apuro por la salida no lo había hecho.
Llegamos mas rápido de lo que pensaba, bajo un poco nerviosa y me dirijo hacia las grandes puertas de la galería. Al entrar me recibe una chica que su gafete rezaba el nombre de Brittany.
_buenos días señorita, desea ver lo ultimo que ha entrado en nuestra exposición?
_buenos días Brittany, si seria un placer. -aprovechando que no me reconoce quero evaluar la atención de esta niña que al parecer es muy charlatana.-
_el ultimo artista que comenzó a trabajar con nosotros tiene unas obras muy atrevidas y al mismo tiempo coloridas.
Mientras me mostraba dichas obras se podía ver reflejadas en ellas el paisaje brillante de un atardecer junto a una descomunal mujer semidesnuda. En otra se veía el cielo lleno de nubes de colores estridentes que brotaban de un cuerpo caminando de espalda con los brazos extendidos mientras se veía su figura translucida por una larga bata de encaje al parecer. La que mas llamo mi atención era una en la se reflejaba una especie de rosa que escondía unos hermosos ojos verdes. Esto me hechizo, era como ver los ojos jade de mi viaje junto a mi flor favorita.
Había otras obras de distintos artistas en su mayoría abstracto, paisajes y uno que otro retrato. pero el que no puede dejar de pensar era el de la rosa. Brittany es una persona muy elocuente, y gesticula mucho. Me gusta como demuestra su amor por el arte aunque no tiene mucha idea al respecto por lo que pude notar.
_eres nueva en la galería verdad?
_si señorita, estoy ahorrando para la universidad.
_o que bien y que piensas estudiar?
_me gustaría mucho historia del arte pero mis padres dicen que es una carrera sin mucha salida laboral por eso e decidido probar suerte y trabajar aquí para así guardarme un lugar para cuando me reciba y mis padres no se preocupen tanto por mi.
_bueno desde ya te digo que me caes muy bien y si haces bien tu trabajo en lo que dure tu contrato no solo te ayudare a costear tus estudios sino que tendrás garantizado ese lugar que tanto ansias.
La chica se quedo mirándome con la boca abierta y demostrando su desconcierto, cuando escucho el traqueteo de unos tacones que anuncia la llegada de otra persona, al voltear veo que se trata de Darla.
_Jaina bienvenida, como no anunciaste la llegada de la señorita? - repuso dirigiéndose a Brittany.-
_o lo siento es que la confundí con una clienta. Siento no haberla reconocido, aunque espero que haya disfrutado del recorrido.
_si muchas gracias.
Me di la vuelta y me dirigí hacia los interiores del edificio rumbo a las oficinas, escuchando el taconeo de Darla que ya comenzaba a irritarme. Al entrar a la oficina tome asiento frente a la computadora y sin esperar a nada comencé a buscar los últimos movimientos de la galería.
-señorita quiere que la ayude en algo, esta es mi oficina, yo puedo mandarle todo a su correo.
_no descuida no quiero perder tiempo, y en cuanto a lo de ayudarme puedes traerme un café bien cargado por favor.
Sale echando humo, creo que no le gusto ni medio que la haya corrido de su espacio personal. Comienzo a teclear y veo mucho inventario que revisar, además de las transacciones que se ven.
Comienzo a tomar nota en mi tableta de los movimientos que hubo desde principio de año para así revisarlo mejor.
Darla me trae el café pedido y trata de meterse entre la pc y yo, le hago saber que mi trabajo lo hare yo misma y que cuando precise su ayuda se lo haría saber.
Me paso el resto de la tarde tomando notas y cuando siento que ya no doy mas del cansancio apago todo y me dispongo a salir cuando de repente escucho unos gritos, me quedo quieta en mi lugar para escuchar la conversación.
_eres una maldita zorra, donde esta el dinero de las obras que se han vendido y no me digas que todavía no se cobraron porque ambos sabemos que eso no es verdad!!
_cálmate y baja la voz por favor.
_como quieres que me calme si me estas robando, mi trabajo es mi vida y una aprovechada como tu me prometió grandes remuneraciones de los cuales todavía no e visto nada y mis obras ya se han vendido!
_baja la voz, ya te estaba por decir que mañana te depositaria a tu cuenta lo adeudado.
_hace mas de un mes que me vienes con el mismo cuento. para ser la dueña de esta galería dejas mucho que desear.
La dueña, mi madre tenia razón y por lo visto esta persona la llamo como a de ser una zorra en mayúscula. Ya cansada de escuchar las escusas de Darla y los lamentos del artista decidí hacer acto de presencia. Cuando salí y me enfrente a la mirada de susto de Darla supe que estaba haciendo las cosas mal.
_quiero tu renuncia mañana a primera hora y búscate un buen abogado.