POV ADRIEN LOWELL La embisto con fuerza, como un animal desalmado, mientras ella llora amargamente. Esa es la última imagen que veo antes de despertar: aquellos ojitos verdes llorando y viéndome con odio. Abro los ojos y estoy llorando, tal y como ella lo hacía. Lágrimas amargas me empapan el rostro y el dolor que me atormentaba antes de embriagarme, ahora se ha vuelto más fuerte, más intenso y más demoledor. Quisiera quedarme tirado en este sitio para llorar por mi desconsuelo. Sin embargo, el asco que siento: por mí, por tal aberración, por esos hombres a los que tanto admiré, por ese partido hijo de puta y por los embates del alcohol; me obliga a levantarme a prisa y correr hacia el retrete. Me inclino sobre él y expulso todo lo que hay en el interior de mi estómago; que es abso

