Rápidamente me di la vuelta y me metí en el coche, miré por la ventana y todo lo que pude ver fue al hombre golpeando la cara de Ramón, grité horrorizada al tiempo que veía como Ramón tropezaba y caía de espaldas sobre la acera, “Mi salvador” solo se inclinó sobre Ramón, le dijo algo y se dirigió al auto
Aún estaba sorprendida por todo lo sucedido cuando mi héroe entro al auto, se detuvo un momento, mirándome y luego cerró la puerta
—¿Estás bien? — preguntó, suspiré y asentí con la cabeza mientras observaba fuera del auto
—Todo está bien, muchas gracias por haberme defendido — dije honestamente y él me dio una sonrisa
De nuevo me estaba perdiendo en sus ojos, una parte de mi quería que este momento durara para siempre, pero como todo en mi vida sale mal, claramente no fue así, y todo por el conductor, quién al parecer se sentía incómodo con nuestras miradas
—Te llevaré a casa — me dijo, le di la dirección y comenzó a conducir hasta allí
Apenas en ese momento me doy por mirar el interior del auto, sus asientos son de cuero, sus detalles son puro lujo, el auto es espacioso y huele muy bien, me doy cuenta de que estoy sentada en un Mercedes Benz y no puedo por el asombro, jamás me imaginé montada en un auto como este, aunque uno de mis sueños siempre ha Sido tener un auto de lujo, o más bien una camioneta, como una Jeep
—Lindo auto — dije con incredulidad de estar sentada en tremendo auto
—¿El coche? No lo creo, yo tengo una mejor vista — sin saber a qué se refería lo miré y él me estaba mirando a mi
—¿Con buenas vistas te refieres a mí? — pregunté sorprendida y él solo se encogió de hombros mientras reía
—Ahora que lo recuerdo, no nos hemos presentado, mucho gusto Nicholas Taylor — dijo extendiendo su mano
—Patricia Mendez, aunque todos me dicen Paty — me presenté y extendí mi mano
Nicholas observo mi mano y su vista subió hasta mi magullada muñeca, su ceño se frunció con rabia y su mandíbula se apretó, aún así, no dijo nada y junto su mano con la mía
De repente, una corriente eléctrica me atravesó justo por dónde nuestras manos se tocaron, miré mi mano, que junto a su enorme mano la mía era diminuta, no sé si él también sintió aquella corriente, pero algo dentro de mí, esperaba que si
Antes de lo esperado, el auto aparcó frente a mi casa, el viaje había terminado…
—Bueno… discúlpame por todo lo sucedido, de verdad me siento terrible por como terminó todo, golpeaste a un hombre que ni siquiera conoces y solo para defenderme, también te quería agradecer, por ello y por haberme traído a casa — le dije un poco avergonzada
—No te preocupes, no tienes nada por lo que disculparte, nadie debe tratar a una mujer de esa forma, él se lo merecía, ni me arrepiento de nada — respondió y sentí que me sonrojaba
—Entonces, de nuevo muchas gracias — le dije con una sonrisa
—Espero volver a verte — respondió, asentí
Salí del auto y entre al edificio
—Y entonces lo golpeó y el cayó sobre el suelo — dije mientras le contaba a Fer lo sucedido esta tarde
Estábamos acostadas en el sofá de la sala, ambas estábamos debajo de la manta, apenas llegué a casa me di una ducha para quitarme todo lo malo del día, las malas energías y el estrés que había acumulado, y luego, completamente devastada por todo lo sucedido comencé a contarle a Fer lo que había pasado con Ramón, claramente omití todas las partes de maltrato, ella no iba a permitirlo si se enteraba de lo que había pasado, y no quería causar más problemas, mucho menos quiero exponerla a ella con Ramón
—¿Entonces que harás? Supongo que no irás a trabajar mañana, ¿Cierto? — preguntó Fer
—No lo sé, aunque si, supongo que lo mejor es no ir, no podría soportar eso, ya lo veo gritándome — o quizá me hará algo más, pensé
—Es lo mejor, pero bueno, cuéntame ¿Tu héroe de traje y mercedes…? ¿Cómo se llama? — preguntó mi hermana
—Dijo que se llamaba Nicholas Taylor — dije recordando su hermoso rostro, sus perfectos ojos y su cuerpo musculoso
—¡Wait! ¡Espera! ¡Espera! — Gritó ella sacándome de mis pensamientos — ¿¡Nicholas Taylor!? — preguntó en un gritó y comenzó a correr por toda la sala para luego correr a su habitación
—¡OYE! ¿Por qué gritas, mujer? Pareces loca — le dije en un grito
De repente, Fer entró nuevamente en la sala de estar con su computadora
—¿Estas segura de que era Nicholas Taylor? — preguntó sin poder creerlo
—Sí, así dijo que se llamaba, ¿por qué? ¿Acaso es algún famoso? — pregunte con curiosidad
—¿¡Famoso!? — pregunto con una risa irónica y con incredulidad en su voz, yo solo levanté las cejas y los hombros esperando una respuesta lógica — ¡ES UN PUTO MULTIMILLONARIO!
—¿Qué…?
—Paty… estuviste con el tipo más rico de todo el país, por no decir que del continente, no lo sé, es un famoso empresario, a su corta edad a desarrollado programas de IA, casi todas las empresas usan su tecnología —Dijo Fer y yo solo pude mirarla con la boca abierta
Pensándolo bien, claramente vi que era rico, tenía un auto enorme y lujoso, también tenía un chofer, ¿Cómo no me di cuenta de que era tan rico? Él era Nicholas Taylor, y yo ni siquiera sabía de su existencia hasta el día de hoy. Sacudí mi cabeza con incredulidad y miré a Fer, que ya estaba buscando información sobre él en su computadora, yo aún no asimilaba todo así que le dije a Fer que ya quería dormir y me dirigí a mi habitación
Al entrar a mi habitación cerré la puerta y me apoyé contra ella, de repente, me llamó la atención ver la chaqueta del traje azul oscuro, Mierda, olvidé devolvérsela, lo más apropiado sería devolvérsela, ya que parece costosa, suspiré y decidí que lo haría lo antes posible, me metí en la cama y bajo las cobijas, mis pensamientos seguían en aquel hombre, hasta que por fin logré quedarme dormida.