Un mes después. Un mes en el que Irina no fue capaz de contarle a su madre lo que fue obligada a hacer por el duque. Un mes en el que se guardó para sí misma que la mayor humillación para ella y para su madre se acercaba.
Lo único que hizo la hija mayor de Adrien fue esconderse en un hotel en la Costa Brava, esperando el día en el que dejaría de ser una heredera para ser una bastarda. Irina se ocultó de todos con su vergüenza y con el miedo que sentía por las amenazas del duque.
Iker fue muy claro con Irina, si se acercaba a Gabrielle no solamente tendría su reputación lanzada a la basura, sino que también acabaría en la cárcel. Si Gabrielle llegaba tan siquiera a tener un resfriado, Iker culparía a Irina y no dudaría en acabar con ella.
Así que se escondió de todo y de todos, lo más l
