Capítulo 9

1446 Palabras

Íbamos de camino a la ciudad y él no despegaba los ojos de su móvil, yo miraba por la ventana sin atreverme a mover un dedo, lo veía de reojo. El chofer le preguntó si iría a su casa o conmigo, él respondió que a su casa sin levantar la mirada. Ninguno iba a mencionar lo que paso en esa habitación, si el asistente del fotógrafo no toca la puerta para avisarnos que debíamos irnos, lo hubiésemos hecho, yo hubiese estado con Don Messina, pestañeaba sin poder creérmelo, suspiraba con pesadez y miraba con angustia fuera de la ventanilla, sentí su mirada sobre mí y me giré, bajo la mirada. —Se acerca un momento incomodo —dijo. Y yo solo podía pensar: ¿otro? —Reunión familiar este fin de semana, mi hermana ganó un torneo de tenis y la vamos a celebrar. —¿Incomodo? —Mi padre y Esperanza esta

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR