La chica sale a dar un paseo cerca de las residencias donde se alojaba, porque quiere despejar su mente, por todas las cosas que le sucedieron hace minutos atrás.
—¿Será que la señora Jenkins tiene razón y estaré alucinando? —se preguntó la chica caminando lentamente —¡Uh! ¡Me duele mucho mi estomago! Creo que voy a dejar de comer dulces por un tiempo.
Mientras Tessa iba distraída caminando, Kevin McCain y sus amigos, se encontraban fumando detrás de un árbol con unas chicas, y enseguida, vieron a la pelinegra andar por esos lados; ese grupo de jóvenes entraba rara vez a clase, ya que veían la universidad como otro club social más para divertirse.
—¡Ayer entré a dos clases, así que hoy me daré el día libre. Necesito unas vacaciones… He estado muy estresado últimamente! —comentó Kevin
