Hermanastros. Amor prohibido. Segunda Temporada

Capítulo 2

(2)

Pero en este momento había muchas más cosas que aclarar. Hoy sería la audiencia de Max Duston, contra todas las chicas a las que había abusado. La primera persona en hablar sobre el tema y poner una denuncia, fue Julia, quien le abrió la puerta a muchas más chicas, para poder hablar sobre el tema. No podía creer que había tantas chicas que no habían hablado del tema, solo por estar en una comunidad cristiana. Yo misma al ver a tantas chicas abrir sus bocas, decidí hacerlo de la misma forma, yendo a testificar.

La sala en donde se llevaría el caso de Duston, estaba llena de personas, había muchas familias de la comunidad que estaban ahí para poderse apoyar los unos a los otros. Era la primera vez que veía a toda estás personas, reunidas en otra parte que no era la iglesia.

Yo fui acompañada por mi madre, quien aún seguía siendo bien vista entre la gente, mientras que George era la persona más odiada, ya que él hizo que la comunidad volviera a creer en la familia Duston, solo por dinero. Así que no pudimos verlo en la sala. Las personas aún tenían dudas sobre mí, les agradaba, pero al mismo tiempo me consideraban una persona que pudo haber cometido un asesinato.

El juicio empezó cuando Max entró por una de las puertas de madera del lugar, usando un traje anaranjado mientras tenía sus dos manos esposadas, mientras un oficial lo acompañaba a tomar asiento a un lado de su abogado. Mientras que por otra parte, Julia estaba sentada del otro lado de la habitación, sentada también al lado de su abogado.

Primero se dijeron los hechos, comentando lo que le había pasado a Julia, ella habló de todo. Sobre el acoso en la escuela, las amenazas y termino por el ataque en el garaje de la casa de los Duston. Y mientras ella decía los hechos, a Duston se le veía temeroso, como si de verdad estuviera avergonzado por lo que había hecho.

Después le tocó atestiguar a más de diez chicas, cinco chicas atestiguan que fueron abusadas por Duston. Las otras cinco, atestiguaron haber sufrido intento de violación por parte del chico, así que una de las cinco chicas que intentaron violar, estaba yo. En un momento sabía que me tocaba atestiguar a mí, ante tanta gente que me tenían resentimiento. Cuando fue mi turno, tuve que subir al estrado, mientras miraba como mi madre rezaba porque me fuera bien.

-Señorita Thompson, ¿Jura solemnemente decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad? -Me pregunta el juez mientras otro hombre, hace que ponga mi mano sobre una biblia.

-Lo juro. -Contesté de inmediato mientras me sentaba en una silla de madera. Después el abogado de Julia fue la persona quien me hizo las primeras preguntas, levantándose de su lugar para acercarse a mí.

-Señorita Thompson, puede contarnos su historia. ¿Cómo fue que el señor Duston intentó abusar de usted? -Me pregunta mientras yo observo a todos en la habitación, que me miran con mucha atención. Incluso pude ver como Duston me miraba directamente, ya que no había alzado la mirada con ninguna persona antes, así que me sentía amenazada.

-Fue el primer día de escuela en la preparatoria, ese día se hizo una fiesta en la casa de Max, en donde mi amiga Julia y yo decidimos ir.-Empecé a contar mis historia mientras miraba a Julia, ella también estaba prestando mucha atención a lo que yo decía.-Cuando llegamos a la fiesta, de inmediato notamos que Max Duston y sus amigos nos miraban, incluso puedo decir que nos estaban ofreciendo bebidas alteradas, que mi mejor amiga pudo haber consumido.-Ahora la miro a ella.-Pero sabía que en ese momento, esos tragos no estaban destinado a ella, sino a mí.

Así que el abogado de Duston hace una pregunta, interrumpiendo al abogado de Julia. 

- ¿Por qué piensa usted que esos tragos supuestamente alterados, eran para usted? -Pregunta el hombre castaño, con la cara cacariza, quién luce muy confiado y arrogante.

-Porque ese mismo día me había enterado que Max, había sentido cosas por mí desde hace mucho tiempo. -Duston solo abre sus ojos, mientras me sigue mirando con mucha atención.

- ¿Y quién le comentó que mi cliente, estaba enamorado de usted? -Pregunta en forma de burla, mientras piensa que solo soy una idiota pretenciosa que intenta hacerse desear. Pero no necesite hablar, ya que Julia decidió responder por mí desde su lugar.

-¡Yo fui!-Respondió valientemente.

-¡Objeción!-Gritó el abogado de Max Duston.-Se le hizo la pregunta a la señorita Thompson.

-A lugar. -Responde el juez dándole la razón al hombre pomposo.            

-Sí, fue mi mejor amiga. -Le contesté de inmediato. -Ella me comentó que él había estado interesado en mí, pero que, por causa de mi hermano, quién era uno de los mejores amigos de Max en ese tiempo, él jamás pudo decírmelo. -Le explique mientras mi boca traía a Jasper a este lugar, sin siquiera estar presente.

- ¿Y su hermano dónde está? -Pregunta el abogado alzando una de sus cejas.

El que me preguntaran sobre Jaspe, me dolía demasiado, porque él no estaba aquí para atestiguar. -Él está en una escuela militar. -Respondí mientras miraba mis manos delgadas, con algo de desdén.

- ¿Y por qué su hermano no le permitió salir con Max? -Me pregunta mientras sigue en su misma posición, con una actitud altanera mientras demuestra que es una persona desagradable.

-Mi hermano sabía que había ya una denuncia de intento de violación, quería alejarme de Duston por ese hecho.-Lo que acababa de decir no ayudaba mucho en el caso de Max, así que el hombre castaño y con gran altura, detiene sus preguntas sentándose en su lugar. Después volvemos con el abogado de Julia, quién era un hombre robusto y de edad avanzada. Yo sabía quién era ese hombre, ya que siempre asistía a la iglesia en compañía de su familia. Era el señor Clinton, quien era un buen abogado que trabajaba en el centro de Birmingham.

-Señorita Thompson, ¿cómo se pudo dar cuenta que las bebidas estaban adulteradas? -Pregunta el señor Clinton.

-Me di cuenta de inmediato, ya que el bar tender de esa noche, miraba a Duston cuando nos dio los tragos. Me di cuenta de que estaban adulteradas, porque mi mejor amiga al consumir sólo uno de esos tragos, se puso muy mal. Yo no lo consumí, porque me di cuenta de la mirada que Max tenía con el bar tender esa noche. -Cuando empiezo a hablar, Julia empieza a asentir con su cabeza. Yo por mi parte, me siento segura al ser apoyada por Julia desde su lugar.

-¿Y después que pasó?-Pregunta el señor Clinton.

-Vi a mi mejor amiga ya muy mal, así que decidimos entrar a la casa, para encontrar el baño más cercano, pero cuando estábamos en la espera del baño, fui arrastrada por alguien a la habitación de Max. -Respondí mientras aún recordaba el momento en el que me jalaron con fuerza, mientras Julia entraba al baño. -Julia no me pudo ayudar, ella entro al baño sin haber visto como alguien me arrastraba.

-¿Cómo fue el encuentro con el señor Duston?-Pregunta mientras yo me quedo callada por unos minutos, mirando a todas las personas que me miraban con atención. Siempre había sufrido por esa atención errónea que siempre mi persona causaba, pero cuando veo a Julia, puedo encontrar una mirada que no me juzga, así que decidí hablar. -Recuerdo que esa persona, me puso en la cama de Duston. Note que era su habitación, ya que tenía fotografías de él, junto con muchos trofeos de fútbol americano. -Tome aire para poder hablar de lo que pasó después. -La persona que me había arrastrado fue Duston, él se subió encima de mí, mostrando su cara, para decirme sus razones por la cual estaba haciendo eso.

-¿Cuáles fueron sus razones?-Pregunta el señor Clinton.

-Las mismas razones que mi mejor amiga me dio, que estaba interesado en mí desde hace mucho tiempo, pero que había sido detenido por mi hermano. -Sabía que todo lo que decía, tenía que ver con Jasper. ¡Si solo él estuviera aquí!

-¿Cómo logró escapar?-Pregunta el señor Clinton mientras empieza a poner sus manos, sobre el estrado, muy concentrado mientras escucha cada respuesta que le doy.

-Mi hermano entro a la habitación, golpeando a Max con fuerza, mientras me permitió salir.-Miró al suelo, recordando como Jasper valientemente trató de acabar con Max, pero tengo que ser consciente de que tuve que sacarlo de esa habitación antes de que matara a Max.-Pero tuve que regresar por Jasper, tenía miedo de que Jasper pudiera ser culpado por algo que el mismo Max causó.-Julia me sigue mirando, ahora mirándome con algo de tristeza, dándose cuenta de lo mucho que Jasper había hecho por mí.

Al terminar de dar mi testimonio, intentó salir del estrado, para después ver sorpresivamente como Max se levanta de su asiento, para empezar a gritar con fuerza.

- ¡Yo te amaba! -Todos estábamos sorprendidos por lo que estaba pasando. - ¡Yo te amaba mucho! ¡Fue culpa de Jasper! -Gritó con desesperación el joven rubio, mientras que yo fui llevada por un policía a mi lugar. No podía creer que Max pasará de lucir arrepentido, con las demás víctimas, pero conmigo se mostraba diferente.

-¡Señor Duston, contrólese!-Gritó el juez golpeando su maso de madera varias veces, mientras que el joven sollozaba con odio. Los policías lograron volver a sentar a Max en su lugar, mientras yo me unía a mi madre, quien me protegió entre sus brazos, haciendo que me sentara a un lado de ella.

Después tuvimos que esperar minutos realmente largos, para que la sentencia de Max se diera. Y después de esperar y esperar, solo pudimos ver como una mujer salía de unas puertas de madera, con el veredicto en sus manos.

-Señorita Calister, díganos el veredicto del caso Max Duston.-Pregunta el juez, quién es un viejo  hombre qué lleva mucho tiempo siendo juez, mientras hace su silla hacia atrás, para entrelazar sus dedos en espera del veredicto. La señorita Calister era una joven rubia que había sido llamada junto con diferentes personas, para ser el jurado de este caso.

-Encontramos al señor Max Duston...-Todos estábamos sin aliento, al ver como la mujer detuvo su hablar al abrir el sobre que tenía en sus manos. -Culpable de violación, por la señoritas Carolina, Deysi, Nancy, Erin y Lisa.-Los padres de las cinco chicas abusadas, empezaron a aplaudir con lágrimas en los ojos, abrazando a sus hijas con fervor. Mientras que la familia Duston, estaban destruidos. Lloraban por lo que había hecho su hijo.

-¿Cómo encuentra al señor Duston, por intento de violación?-Pregunta el juez a la señorita Calister. En ese momento tomé la mano de mi madre, ya que yo estaba dentro de ese caso.

-Encontramos al señor Max Duston...-Lame sus labios la rubia, mientras que todos estamos tensos. -Culpable por intento de violación, por la señorita Julia, Lea, Fergie, Susan y Anna. -Mi madre al oír el veredicto me abraza con fuerza, llorando mientras yo puedo ver como los padres de Julia abrazan a su hija también. Todos derramando lágrimas por haber hecho justicia.

Pero aún teníamos que escuchar cuánto tiempo estaría en la cárcel el joven.

-¡Orden en la sala!-Gritó el juez mientras veía como todo el lugar se conmocionaba.-¡Orden!-Grita una vez más, mientras todos nos sentamos en nuestros lugares para guardar silencio. El hombre después de hacernos callar, toma unas hojas para poder decir la sentencia. -El señor Max Duston tendrá que cumplir diez años de cárcel por abuso s****l. -Al oír la sentencia, podemos ver como la madre de Duston se desmaya. -Y también deberá cumplir cinco años por intento de abuso s****l, que da una sumatoria de quince años de cárcel sin derecho a fianza. -Dijo el juez golpeando su maso con fuerza, terminado esta pesadilla para todos.

Por un momento me sentí realmente afortunada por haber podido atestiguar y hacer justicia, pero después pude ver a los padres de Duston. Su madre estaba desmayada, mientras que su padre trataba de ayudar a su esposa, con lágrimas en sus ojos. En ese momento supe que la vida no era tan justa como yo pensaba que era. Sabía que los padres de Max no criaron a su hijo para ser un delincuente, sino que su hijo tomó una decisión incorrecta.

Así que cuando se estaban llevando a Duston, sentí de inmediato su mirada. No podía creer que me miraba con enojo, mientras que su madre estaba tendida en el suelo sin poder respirar. Solo me miraba con odio, pero de alguna manera me sentía protegida por las manos de mi madre, quien me toma de la mano para salir del lugar, lo más pronto posible. Pero a pesar de que queríamos salir del lugar, sin hablar con nadie, no pudimos. Julia decidió alcanzarnos a las afueras del juzgado.

-¡Lea!-Llama la atención de mi madre y la mía, mientras que es la primera vez en seis meses que me habla. Yo la mire a los ojos, ya que sabía muy bien él porque estaba enojada conmigo. Haber tenido un romance con mi hermano, fue algo que la destrozó por completo, mientras que la muerte de su hermana, había sido un golpe en su familia, que le cambió la vida para siempre. -Gracias. -Me dice entre lágrimas.

-De nada. -Le contesté dispuesta a irme del lugar, con tan solo un "gracias", pero ella me detiene. -¿Puedo hablar contigo?-Me pregunta mientras yo miró a mi madre. Ella había sido tan cautelosa conmigo, protegiéndome de las personas que querían hacerme daño, así que sabía que tenía que preguntarle qué hacer. Mi madre por su parte, solo asiente con la cabeza.

-Te espero en casa. -Me dice sonriente, mientras deja el lugar. Yo me sentía enojada con el mundo entero, incluso con Julia, así que no fue fácil para mí volver a hablar con ella.