—Estás enojado conmigo. —Luz detrás de Fernando, en el dormitorio.
—Un poco, te pudo haber pasado algo, nunca hagas eso de nuevo.
—Lo prometo, pero no te enojes, es que quería llegar rápido al hospital, es que quería cuidar a mi padre hoy.
—Llame al hospital y tu padre está sedado para que descanse, además no permiten que se queden ahí.
—Entonces mañana me iré temprano.
Ambos están por irse a la cama, Fernando se hace el desinteresado y se acuesta en su lado, Luz se quedó solo observándolo, ella cree que él sigue molesto, apaga la luz se mete a la cama quitándose su ropa, usara su mejor arma, para que él la perdone por su imprudencia, ya desnuda debajo de la sabana, se le acerca y lo abraza, Fernando se dio la vuelta y cuando la atrajo hacia él, fue cuando palpo su desnudez.
—Eres un
