-Repite lo que dijiste Jack-. Pidió con voz incrédula Jace. Le eche como pude una mirada a mi hermano mayor, él no se amedrentó, cuadro los hombros y repito su declaración muy seguro. -Mía-. Su voz sonando más como una amenaza que una declaración. -¿¡Quién es tuya pedazo de alcornoque?!-. Se escucha la réplica casi de inmediato seguido de un quejido de dolor. Y así en un par de segundos la peliblanca paso de estar entre mi madre y Jackson a esconderse detrás de mí y Rafael. Voy a admitirle que es rápida, bien por ella, va a necesitarlo si quiere sobrevivir en esta familia. Pero tan pronto cómo me vino ese pensamiento se me fue cuando la vi sostenerle la mano a mi mate. ¡Qué no toques a mi pareja tú gata de callejón! Rugió Casiana en mi cabeza, y al parecer no solo en la mía porque

