Ambos regresaron al hotel donde se estaban hospedando, Juliana buscaba la manera de no despegarse de Chester, presentía que tarde o temprano descubriría algo nuevo, Chester andaba consigo los expedientes del asesino del cereal, caso por el que Carlos fue invitado a la ciudad. Después de esperar 30 minutos, saca el teléfono que me dió Carlos y mandá un mensaje de texto. «Creo que mi compañera es parte del grupo y sabe que ya lo sé, su apoyo por favor, sino estaré en peligro, motel Un día soleado, habitación 28» Lo único que pensaba Chester es que funcionara su señal de auxilio, a las 2 horas llegan 2 camionetas, se bajan 4 sujetos y suben a la segunda planta, al tratar de abrir se escucha un disparo, la pensó un momento en salir y luego se escucharon más disparos, el se decide salir con

