Serena
Los tres pequeños nos observan curiosos, veo a Damian por un momento, está ansioso, sabía que mis hijos debían saber quién era su verdadero padre pero no sabía como lo tomarían.
—Mami le pasa algo malo a Thomas!!, espeta Charlotte preocupada por su hermano.
—No cariño tu hermano ya está mucho mejor, es sobre otro tema mucho más importante.
Damián coloca mi mano en mi hombro, no sabía si era el momento indicado, pero debía hacerlo en algún momento esto iba a pasar.
— Niños quiero que me escuchen con atención—, ambos me miran y asienten el pequeño Alex no dejaba de verme.
Me siento al lado de Thomas y acaricio su cabello, tomo la mano de Charlotte,
—Niños, Eliot no es su verdadero padre, su verdadero padre es el señor Damián Walton el padre de Alex.
Los dos abren sus ojos como platos al escucharme, quedan en silencio por un momento, Thomas lo observa curioso pero Charlotte suelta mi mano molesta.
—Mamá mentirosa, ese señor no puede ser nuestro padre, dice molesta y cruza sus brazos.
—Eso quiere decir que Alex es nuestro hermanito mami, ¿yo soy su hermano mayor!?
No podía creer lo que escuchaba, ambos eran chicos muy lindos, yo asiento.
Ambos miran a Damián que estaba asustado ya que se alarmó por la reacción y expresión de Charlotte.
—No,no,no, mi papá es Eliot, yo solo tengo un papá, ella empieza a correr y sale de la habitación.
Yo salgo a correr detrás,
—Charlotte!!!, espera por favor!!
En ese momento veo en el pasillo a Eliot con unas bolsas de regalos, Charlotte al verlo corre a sus brazos.
El se agacha para abrazarla, sus ojos estaban llenos de lágrimas, ella alza su rostro y lo observa, coloca sus manitas en su rostro.
—Eliot cierto que tú eres nuestro padre y no ese señor, cierto, mamá miente cierto, espeta con su voz entre cortada.
Eliot levanta su rostro hacia mi molesto, sabía que estaba furioso, abraza a Charlotte y la alza en sus brazos.
En ese momento llega Damián y se hace detrás de mi, veo como Eliot nos observa a los dos.
—Claro cariño tu eres mi hija y de nadie más—, veo como Damián se empieza acerca a ellos pero lo tomo del brazo.
—Damian por favor, ella necesita tiempo por favor, está muy confundida entiende por favor.
Damián me mira, luego mira a Eliot le lanza una mirada feroz y cruel, el se la lleva, jamás pensé que ocurriera está situación.
Suelto a Damián y paso mi mano por mi cabello, —creo que no fue en un buen momento me decirles la verdad.
Sin decir más, empiezo a caminar a la habitación, no sabía cómo había reaccionado Thomas, al entrar lo veo con Mahia y Alex jugando.
—Mami, mami, ya que Alex es nuestro hermanito, puede ir a vivir con nosotros!!
—Claro campeón, pero todo a su tiempo, ahora debes descansar, dice Damián al entrar a la habitación.
Damian se sienta a su lado, acaricia su cabello con una sonrisa, hace años que no lo veía sonreír; en ese momento Thomas se acerca a el, lo abraza y le da un beso en su mejilla.
—Esta bien papá, esperare y por favor no te molestes con mi hermana, si—, dice con una linda sonrisa.
Mahia y yo abrimos un poco la boca al escuchar a Thomas, veo como Damián lo abraza con fuerza y cierra sus ojos al hacerlo.
Veo como pasa saliva antes de hablar, dice unas palabras con su voz un poco ronca.
—Claro que no estoy molesto con tu hermana, los amo a los tres, mi pequeño campeón!!
Alex se acerca a ellos, y los trata de abrazar con sus pequeñas manos, el acto es hermoso de ver, sonrió al verlos pero sabía que no iba hacer fácil con Charlotte.
**
Entro a casa, todo estaba apagado me extraño un poco, por un momento pensé que nadie estaba en casa, prendo la luz y me asusto ya que veo a Eliot que estaba sentado con una copa de whisky en su mano derecha.
—Dios!!!, me asustaste porque todo estaba apagado, donde está Charlotte.
Veo como toma un sorbo de su trago antes de responder, deja el vaso en la mesa de la sala.
—Ella está durmiendo, no quiso comer nada, dice levanto se del sofá.
Me sentí culpable al escuchar esas palabras, el se acerca a mi furioso, —Serena como pudiste!!!
—Eliot, ellos debian saber la verdad de quién es su verdadero padre, por favor entiende.
Suelta una risa sarcástica, —su verdadero padre y acaso yo que soy carajo!!, ¡¡¡DIME!!!
—Eliot tu eres.......bueno yo—, veo como se tensa su mandíbula.
—Que ibas a decir, que no soy su padre, solo la persona que los cuido y crio—, espeta molestó.
Yo me acerco a el, —claro que no Eliot pero sabías que esto iba a pasar, ellos como Damián tenían el derecho de saber la verdad!!!
Jamás pensé que esto se fuera a complicar tanto, —Serena, sabías que nos íbamos a tomar tiempo para decirselos, ¿que acaso lo hiciste a su manera porque aún no amas!!?
Al escuchar sus palabras me quedo en silencio, —¿aún lo amas Serena?, coño responde!!
—Eliot yo no.......lo hice porque era mi deber—, veo como se termina su trago y coge su saco.
—Eliot a dónde vas!!—, el pasa a mi lado sin mirarme, —necesito tiempo Serena, no me esperes.
Escucho como azota la puerta de entrada, yo me tumbó en el sofá, llevo mi cabeza hacia atrás, no sabía que hacer, pero no sabía porque no fui capaz de responder esa pregunta, acaso era verdad aún amaba a Damian.
Había pasado tres días y Eliot no había vuelto a casa, Charlotte seguía molesta conmigo, le hablaba a todos menos a mi
Thomas había vuelto a casa, Damián le mando hacer muchas pruebas para saber si era alérgico a otras cosas, pero por suerte todo salió bien.
Veía por la ventana como jugaban los niños, mi madre me acerca un poco de café.
—Serena, entiendo que debías decirles la verdad, pero no puedes obligar a Charlotte a qué quiera a su padre.
Suspiro y dejo la taza en el mesón, —lo se madre y no lo haré, Damián tampoco lo hará, ya que Eliot estuvo con ellos desde que nacieron y Charlotte es más apegada a Eliot.
—Eso es cierto, desde pequeña nunca se ha separado de el y Thomas que te ha dicho—.
Sonrió un poco y lo observo, veo como corre y sonrie, —que está feliz de tener dos papás y otro hermano, el lo tomo mucho mejor que su hermana—.
Mi madre coloca su mano en mi hombro, —debes tener paciencia, y que todo se solucionara.
En ese momento entra la dama de llaves y Nana de los pequeños, —señora Serena ahí un hombre en la puerta con un pequeño.
Al escucharla volteo un poco nerviosa, —por favor dejalos pasar a la sala, ya lo atiendo.
Mi madre me observa, volteo a verla, —porque me miras así, quieres decirme algo!!
—Serena, ¿tu aún sientes algo por ese hombre?
Y ahí estaba esa misma pregunta de nuevo, no entendía porque esa pregunta me seguía, yo solo salgo de la cocina sin responder esa pregunta de nuevo.