Continuamos mirando la película y al terminarla ambos nos acurrucamos en el sofá. Mis ojos se cerraron suavemente.
Perspectiva de la autora
Ambos se habían quedado dormidos, la horas transcurrieron. La señora Leah se levantó, los miro en la misma posición así que tomó una sábana y los cubrió. Estaba sentada tomando una taza de café cuando tocaron a la puerta entonces ella se dirigió para abrir, al hacerlo miró que era Dylan.
— Matteo está dormido, pero entra para que lo esperes.
— Está bien, gracias señora Leah.
Ella se fue a servirle café con galletas y se puso a esperar, después de un rato ellos despertaron.
— ¿Desde hace cuánto estás aquí, Dylan?
— Desde hace un rato, pero no te preocupes que valió la pena la espera.
Perspectiva de Hannah
Dylan se miraba contento por estar comi
