Por Benicio Volví a mi oficina, pero no podía concentrarme en mi trabajo, ni me senté, estaba mirando, a través del ventanal que daba a la calle, cómo la gente caminaba apresurada, porque hacía bastante frío. El día estaba nublado y parecía que iba a llover, pero dentro del edificio no se sentía ni un poco de ese frío que parecía invernal, aunque estábamos en otoño. Le mandé un mensaje a Eve y le pregunté cómo les está yendo, me dijo que bien, que su hermana estaba más tranquila, que en unos minutos, Ciro las va a acompañar a la comisaría para hacer la denuncia y luego a un juzgado. -¿Podés salir un momento? -Sí, ya hablamos todo lo importante. -Ok, te espero en la puerta de la oficina. Así lo hice. Evelyn salió de la oficina de Ciro, tenía el tapado en la mano. Estaba vestida co

