—le dijimos Cristina y yo a Evan. Hablamos de ello y ambos tenemos la sensación de que tiene algo que ver con el tratado pero no sabemos cómo. Hay tantas piezas que no cuadran, Ethan suspiró antes de tomar un sorbo de su bebida. Evangeline se secó una lágrima cuando Liam la sentó en su regazo y le susurró algo tranquilizador al oído. Ella suspiró y asintió. Luego me miraron con una pequeña sonrisa de coraje. —Obviamente quería el asiento de papá y no le importaba cómo. Quiero decir, de lo contrario, no habría utilizado un peligroso ejército de pícaros para destrozar a la mitad de la manada. —Aunque no lo entiendo; ¿Los pícaros, los vampiros, el tratado? ¿Quién ganó con eso? ¿Por qué? ¿Por qué nuestras manadas? Han pasado diez años y no ha pasado nada.— Lander se mordió el labio y asintió

