Asentí mientras mi lobo soltaba un gemido ante el pensamiento. —Lo sé. Lo intentaré.— —¿Hola Evangeline?— —¿Mmmm?— Murmuró mientras jugaba con unas briznas de hierba. Sus ojos estaban sumidos en sus pensamientos mientras sus dedos giraban sin pensar la espada entre ellos. —No intento ser grosero, pero ¿por qué papá y Lucy, no lo sé, no hicieron algo antes?— Evangeline se encogió de hombros mientras negaba con la cabeza. —Tienes que entender a Cristine, fue malo para todos, incluidos ellos. Perdieron a sus dos cachorros, sus únicos cachorros, una nuera y tres nietos. Eso y nosotros perdimos casi la mitad de la manada, muchos de ellos sus herederos . amigos. Era todo lo que podían hacer para despertarse por la mañana y seguir adelante. Lo recuerdo. —La abuela solía llorar en voz baja en

