CAP 50

1843 Palabras

Isabela bajo del taxi junto a Danilo quien parecía su guarda espalda, la acompañaba a todos lados no importaba si solo iba al baño, esa era la orden de Dante. No dejarla sola por ningún motivo, claro era algo que Danilo no podía cumplir a la perfección. Al bajar sintió el delicioso aroma a café, un deleite para sus fosas nasales. — Quiero café. —Susurro apresurando sus pasos para entrar en el local de donde provenía el delicioso aroma. —Señorita Isabela espere. — Isabela dio pasos más grandes buscando el aroma que la había hipnotizado, el único café que tenía ese aroma intenso, cálido, agradable, con un toqué de cacao, nueces y especies, recién tostado, molido y preparado con amor era el que su hermano Alfredo hacía. Ya que Alfredo no le dirigía la palabra no podía pedirle que le enseña

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR