Capítulo 26 Estoy detrás de una pared escuchando todo lo que pueda pasar dentro de la habitación, no estoy dispuesto a dejarla a solas con él, aunque las doncellas tengan que estar presentes. No confío en este hombre. – Buenos días, su alteza – le dice. Por el silencio que viene después casi puedo verlo haciendo una reverencia – Buenos días príncipe Jesang, ¿Qué lo trae por mis aposentos? – ella suena fría – Espero no estarla incomodando – me aguanto para no decirle que a quien molesta es a mí – Para nada, yo solo pregunto por curiosidad, no es común que un caballero venga hasta aquí – le remarca ella – No soy cualquier caballero, no sé si lo recuerda. Pero soy su prometido – No es algo que vaya a olvidárseme tan rápido, ni usted va a permitírmelo – él hace un ruido que me hace pens

