El primer amor

capítulo 4

A la hora de la cena mi enano, me hace caritas, me lanza besitos y hace corazones con sus manos, mientras yo le pateo por debajo de la mesa.

- Mamá, me ha dicho que vino un chico que nunca había visto. - dice mi padre fijando su verde mirada en mi.

Y yo sin dudar mi contestación le respondo.

- Es un nuevo compañero, entro ayer y el señor Martínez me ha pedido que estos días lo ayudará ya que tenemos las mismas clases.

- ¿También estudia periodismo?

- Así es.

- ¿Ya has terminado tu artículo de esta semana? Tienes que enviarlo esta noche.

Mi padre es el dueño de un editorial muy conocida y me ha dado un articulo una vez a la semana en una de sus revistas, y por lo que se no ha caído nada mal en los lectores.

- Si papá, le daré unos toques antes de enviarlo desde que suba de cenar.

Él me mira y sonríe.

- Eres la mejor, no dejes que un chico te nuble el cerebro.

- No entiendo ese comentario, ayer Mathi dijo que tenía novia y no ha pasado nada y ustedes veen que viene un compañero nuevo ¿y ya me están casando?

- No bichilla. - dice mi padre mirándome con Ternura - simplemente se que eres excepcional.

- Gracias papa, solo es un compañero.

Solo es un compañero que me ha besado y que solo con esos besos he tenido que cambiar de bragas, pero esto no se lo cuento, mi padre se llevaría las manos a la cabeza pensando en que han profanado a su bichilla.

- Él sábado he invitado a una barbacoa a la nueva familia que llego, no hagas planes. - dice mi madre.

- Vale mamá. - decimos yo y mi hermano a unísono.

Cuando subo a mi habitación decido hablar con mi hermano sobre Joanna.

- Lu, ¿Qué haces en mi habitación? - dice sorprendido.

- ¿Joanna? ¿Enserio?

- Las noticias vuelan por lo que veo. - dice sin mirarme.

- Mathi...

- Lo sé hermanita, lo sé, tendré cuidado. Oye Lu.. - Lo miro esperando a que me hable - ¿Tu ya has tenido relaciones?

La sangre vuelve a abandonar todo mi cuerpo para ir toda a mis mejillas.

- ¡¡¡Mathi!!!

- Vale te iba a pedir condones pero veo que tu tampoco.

- Mathias, llevas dos días con esa chica, y solo tienes quince años.

- Y tu vas a cumplir veinte ¿a que estas esperando?

- A terminar la carrera, no puedo permitir que me nuble la vista nada... - pero después de meditar unos segundos - pero si vas a hacerlo por lo menos protégete no quiero sobrinos aún.

- Lo haré Lu.

- ¿Tienes dinero?

El asiente, y yo doy por terminada nuestra conversación, saber qué mi hermano tiene pensamientos de tener relaciones, y como bien dice él con casi veinte yo... yo acabo de darme mi primer beso.

Me toco los labios, pero rápidamente saco esas ideas de mi cabeza, me siento en el ordenador repaso el artículo que tengo que enviar y justo cuando voy a enviarlo recibo un wassap.

" hola guapísima, no puedo dormir pensando en tus besos, ¿Podemos vernos?"

Y mi respuesta es corta y contundente.

" No"

Pero la suya no se hace esperar.

" estoy en tu puerta si no bajas tocaré el timbre"

Pienso en que contestar, mañana hay clases... pero unos segundos después vuelve a sonar mi móvil.

" sigo esperando tu respuesta. ¿toco el timbre?"

Y accedo a sus peticiones como no el me nubla la mente.

" No lo hagas dame unos minutos"

Repaso el artículo me asesoro que se ha enviado correctamente, me pongo un vaquero, una camiseta y una chaqueta vaquera, me hago una coleta y bajo.

Al pasar por el salón ya tengo mi mentira preparada, primera vez en mis diecinueve años que les mentiré.

- Lía se ha llevado un libro que necesito para estudiar ahora, voy a buscarlo ahora vengo.

Pongo mi sonrisa y ellos me sonríen.

- Ten cuidado.

Yo asiento y salgo.

Cuando veo que Brais esta en la entrada, vuelvo a mirar a mi casa y veo a mi hermano en la ventana con su sonrisa picarona, le hago un gesto para que se esté callado y él me lanza un beso.

Como quiero yo a mi enano.

Nos subimos a su coche y vamos en silencio. Se para en un parque.

- Que sea la última vez que vengas ami casa tan tarde, tuve que mentir a mis padres por primera vez en diecinueve años.

- Ya has hecho dos cosas por primera vez hoy. - dice sonriendo.

- ¿Brais que buscas en mi?

Mi pregunta lo descuadra. Y yo sigo hablando.

- ¿Buscas sexo? Porque dudo que sea amor, ya que el amor a primera vista no existe y nos conocimos ayer.

- Luana. - me ha dicho por mi nombre completo y ya vamos mal - no se lo que es, pero desde que te vi ayer en el despacho de mi tío no puedo sacarte de la cabeza, y hoy te he besado y voy a peor...

- Antes que nada, no vuelvas a decirme Luana, todos me dicen Lu o Lua, y ahora entiendo El porqué Martínez me encargo que te acompañara eres el enchufado de la universidad, ya me extraño cuando entrabas un mes después de empezar las clases.

¡Hay lo que lo acabo de decir!

Pero él como si nada, solo sonríe.

- Me encanta cuando te enfadas.

- Sigo esperando saber que esperas de mi Brais.

Él coge mi cara con suavidad, sus manos son suaves me gira así a él y me vuelve a besar y se me vuelve a nublar la mente, y es que yo no sabía que besarle iba a ser tan adictivo.

Cuando separa su boca de la mía soy yo la que termino por volver a besar.

¡Adictivo!

Sus besos, su lengua, sus manos recogiendo mi cuerpo mis piernas y se para justo encima de mi v****a, aun con el vaquero siento sus caricias, siento como mojo mis bragas.

- Para, para... - digo antes de cometer una locura en su coche. - Llevame a mi casa.

- Supongo que si nunca habias besado, nunca has...

Niego con la cabeza y la sangre que se me había acumulado en mi v****a sube a mis mejillas.

- Y mi idea no es tenerlas por primera vez en un coche con un chico que acabo de conocer. Ni siquiera se nada de ti, y ya te dije no puedo dejar que me nuble la vista un chico con sus enamoramientos ahora.

- Tu cuerpo no dice lo mismo. - dice burlándose.

- Que gracioso. - digo enfadada. - Soy humana y también siento.

- ¿Eres humana? Vaya yo pensé que no.

- No te burles.

Vuelve a besarme, ¡Joder! Porque soy tan blanda con él. Y esta vez su mano se adentra dentro de mi pantalón ¿Lo paro? Pues no, soy tan blanda me gusta tanto lo que me hace que me estoy dejando. Cuando las yemas de sus dedos tocan mis bragas, el se aprieta más contra mi boca para no poder pararlo ¡pero si no te voy a decir nada! Se adentra en mis bragas y cuando la piel de sus dedos roza mi v****a, yo ya no se si es la fauna o es el universo lo que tengo en mi estómago.

- ¡Ah! - termino por gemir en su boca.

El sonríe y no para, me come la boca con la suya y mi v****a con sus dedos, siento como introduce un dedo dentro y otro gemido sale de mi.

- Creo que deberías parar ya. - Susurro en su boca.

Él sonríe.

- ¿Estás segura?

¿Segura? Claro que no quiero que siga... pero que clases de mujer soy yo que se deja toquetear por un tío al que acaba de conocer. Y claro como mi cerebro está nublado niego con la cabeza.

- Hoy también sentirás tu primer orgasmo. - me susurra en el oído.

Me muerde la oreja y hasta eso me gusta, siento calor, mucho calor, Brais me besa el cuello, me besa por encima de la camiseta los pechos, y aprieta su mano contra mi v****a y empiezo a sentir una sensación en mi v****a y grito de puro placer. ¡Qué acaba de pasar!

- Tu primer orgasmo también es mío.

Esboza una sonrisa triunfal, se ha llevado el premio. Y la vergüenza empieza a venir a mi.