Era el turno de salida de Marbiel, la joven recogía sus cosas un tanto distraída. No tenía idea de donde estaba su amiga, pero tampoco le dio importancia ya que Lavanda tenía un novio con el que se perdía de vez en cuando así que a ella le tocaba regresarse sola a su casa. De camino por el corredor hacia la salida pensó en ese príncipe, sintió un poco de pena porque estaba como loco buscando a su novia. Se preguntó ¿Dónde estaría esa princesa?
Al salir al exterior del hotel, la brisa de una tarde calurosa la envolvió por completo. Marbiel achico los ojos ya que algunos rayos de sol le daban directo a su rostro…
Ramís aguardaba en la limusina en la parte trasera del edificio, al idiota de Bedual se le habían quedado unos documentos importantes con los que realizaría unos negocios importan
