Siete historias y un mensaje

Lily

             En el transitar de la vida, debemos darnos cuenta de que hay dos tipos de impulsos causados por personas de distintos tipos de interés para con nosotros. Estos impulsos son: Primero, aquel que recibimos de personas honestas, libres de esa toxina que posee distintas maneras de nombrarse, pero que significan lo mismo, como lo son, la envidia, el rencor, la hipocresía. Estos impulsos puros, sanos, son los que nos hacen levantar un vuelo a una meta desconocida, pero que sabemos que el final estará lleno de himnos de alabanza y  coronas olímpicas de olivos y claveles, nos llevaran a territorio de ánimos , triunfos y he ahí el verdadero y buen interés. Existen por otra parte esos impulsos o más bien lanzamientos, que nos envían a un terreno comprometido de espinas, o a un balde de agua helada que nos enfriara tanto los huesos y músculos, que no tendremos tiempo ni espacio para recuperarnos y seguir adelante. Estas tracciones se aferraran a la parte oscura de la moneda, no nos dejara opción que la de detener nuestro ritmo de paso, y confundiremos el terreno en el que vamos hasta hacernos caer por un barranco. Estos son los impulsos tétricos que nos expone en la vida a todos y que utiliza como instrumento a personas viles y de corazones grasos y espinosos.

          Debemos tener en cuenta esta diferencia y saber que tenemos todo tipo de personas alrededor, incluso cenando en la misma mesa, bebiendo nuestro mismo vino, y hasta besando nuestra propia mejilla. Que podrían ser buenas como malas y nos harán bien y mal cuando menos lo esperemos, solo tenemos que tener mucha vista y olfato para esto. Para hacerme entender en un lenguaje más informático. Debemos tener todos el mejor de los antivirus en el centro del corazón, lidiaremos con muchos archivos pero aunque tengan algo maléfico, ahí estará la exacta defensa para recuperarnos o no dejarlos pasar a otra fase de nuestro interior que le pueda hacer daño.

      Esta es una conversación que entable con una de las mejores amigas que he tenido y que conozco desde que nací, pues justamente brotamos el mismo año, en la misma ciudad y en el mismo materno. Por cosa de respeto, evitare dar más datos para que alguien que alguien en común, no pueda sacar la matemática exacta y así tener una idea de a quien se refiere. Lily es su apodo en esta plática que les publicare y que si lo hago no es por perjudicar a nadie, sino con el ánimo de ayudar a muchas que puedan leer todo esto, a tener en cuenta cual  es el género del impulso que le podrían dar en el trascurso de una relación o amistad.

             Lily y yo teníamos seis años sin vernos, solo en este tiempo recibí unas diez fotos por internet de ella y se veía linda como siempre. Era rubia de nacimiento con pecas en los cachetes y en su nariz rezongada, lo que le hacía más bonita y simpática todavía. Labios definidos y, ojos bellos, achinados pero de un color verde amarillento a veces podría decir que se veían del mismo color del cabello. Lily era hermosa y no niego que en mi época de estudiante la desee y soñé muchas veces con que nuestra amistad se tornara en algo más, pero no paso.

                      Ella conoció un chico de otro país y comenzó a salir con él, se veía un chiquillo bienhechor y hasta cuando pasaban juntos en el auto se detenían a saludar con mucha cortesía. Pues no duraron mucho de novios se casaron y se fueron del reparto donde vivíamos al extranjero, a unas 12 horas de vuelo. A partir de ahí fue que no nos vimos más sino por e- mail y algún que otro chateo. Desde hace un mes para acá, se le ocurrió, luego de tanto tiempo, enviarme unas fotos las cuales me sorprendieron cuando la vi tan flaca en ellas, además de unas ojeras hechiceras. Siempre me fue muy sospechosa su negativa constante de no mostrarse por la cámara web.

      Pero ya aquí termina mi narración y le doy paso a la conversación que tuvimos Lily y yo.

LILY DICE:

                 …Me alegra mucho tu mamá este bien y que hayas cambiado de trabajo...a veces le tememos a los cambios pero hasta los canjes malos nos enseñan cosas.

YOYO DICE:

                     GRACIASSSSS, así es, por los momentos no me quejo y sé que esta etapa del trabajo es para adaptarme. Mi mamá a cada rato pregunta si hable contigo y de cómo estas, por cierto no me has dicho aun… te vi muy flaca en esas fotos…

LILY DICE:

                  Es que estoy de candidata para el miss y tú sabes son las reglas jajaja… 

YOYO DICE:

                 JAJAJA… No lo pongo en duda, sabes que siempre has sido linda, hasta te escribí una vez en el cuaderno de inglés, “VAS A TENER QUE LLEVARME AL NEUMONOLOGO LILY, PORQUE LLENAS MIS PULMONES DE SUSPIROS…”

LILY DICE:

                      JAJAJAJAJAJA, si recuerdo y me causo mucha risa, hasta lo comente con Zulay la negrita… No te imaginas cuanto extraño esa época, coño es increíble lo que echo de menos esos instantes… me siento mal, muy mal…

YOYO DICE:

                   Me lo supuse, pero ¿qué es eso que te hace tanto daño? Cuéntame

LILY DICE:

                  Estoy llorando, dame unos segundos — Estuvo casi diez minutos sin escribir

LILY DICE:

                 Al año de haber salido de allá con mi novio comenzaron haber problemas.

YOYO DICE:

                 Pero qué tipo de problemas, todos en el reparto teníamos en mente que a la que mejor le fue de todo el  grupo  era a ti, hasta pensamos que te habías olvidado de nosotros, y nos metimos en la cabeza que  difícilmente volveríamos a verte.

LILY DICE:

                  No, no, yo no niego que al principio me iba bien, y lo veía todo distinto y tan bonito. Yo te conté en mis primeros e mail que te envié, que hasta fui a París, tan linda, y que tanto hablamos de conocerla juntos, ¿te acuerdas? Marcel Proust, Víctor Hugo. Fui a sus tumbas ¡Hello!

YOYO DICE:

                   ¡Te odio! Si, allá fue que te llevaron al concierto de U2, y que me hiciste comer las uñas de la envidia…definitivamente te odio.

LILY DICE:

                    Jajaja, yo te quiero. Si amigo así fue, me divertí mucho. Hasta me reí que casi me orino, cuando U2, en una parte del concierto, toco un tema, la gente comenzó a lanzarle monedas al escenario, como una tradición de esa canción. Me gusto eso y le pedí a mi marido una moneda, la apreté bien fuerte lance con todas mis fuerzas… lo que pasa  es que se me olvido saltar y le pegue la moneda en la cabeza al chico que estaba delante jajajaja

  YOYO DICE:

                 Lily que loca eres jajajaja,  si llego a estar ahí seriamos dos los que se mean de la risa jajaja. Pero ¿qué paso?  si todo era tan perfecto, viajes,  conciertos, linda ropa. No entiendo por qué dices que te sientes mal.

LILY DICE:

                  Porque a veces cuando crees tener toda la luz no haces más que encandilarte y comienzas a confundir lo real con manchas. SI tienes tiempo te cuento todo.

YOYO DICE:

                 Tenía que hacer algo, pero no es nada que no pueda esperar, cuéntame aquí estaré leyéndote.

LILY DICE:

                 Luego de esos viajes a tantas ciudades bonitas, conciertos, y hasta al Caribe llegue a ir para convivir con hermosas playas. Una noche ya estando aquí en casa vinieron dos amigos de mi esposo, y que eran: “Compañeros de escuela”. Todos nos tomamos unas copas y pusimos videos míos de cuando viví allá, reímos y todo súper. En una de esas me fui a la cocina a buscar más hielo, pero había bebido algunas cervezas y llegando a la nevera me dieron deseos de hacer pipí .Deje lo que hacía y fui al baño. Cuando llegue y abrí la puerta estaba mi esposo metiéndose cocaína en esa nariz como desesperado…

YOYO DICE:

               ¿QUEEEEEE?  Coño Lily.

LILY DICE:

                Si, Si, ya va, ya va. Cuando él me ve le lanza una patada a la puerta que casi me arranca la cabeza. Luego molesta y no entendiendo muchas cosas me fui a la cocina y allí apareció a los cinco minutos. Lo que hizo fue pegarme un bofetón reclamándome que no me tengo meter en las cosas que haga.

YOYO DICE:

                   ¡Qué hijo de puta!

LILY DICE:

                   Después que llore un rato, me beso y llevo a la sala donde estaban sus dos amigos entre humo y risas algo descontroladas. Uno de ellos se levantó y con toda la confianza del mundo me abrazo, pero fue un abrazo algo s****l que no me dio tiempo hacer nada. Mi esposo les decía “Ella es el bomboncito latino”. Bueno, para no cansarte. Esa noche me pusieron algo en alguna cerveza y termine en la cama violada por los tres.

YOYO DICE:

                     Hijos de puta… malditos eternamente, miserables. Coño Lily y que haces allá aun, lárgate de allí.

LILY DICE:

               Ay amigo, como si eso fuese tan posible. Al cabo de las semanas comenzó a obligarme a consumir coca, cuando no lo hacía recibía una tanda de bofetones y   en el momento que discutíamos y ya él estaba drogado, hasta patadas me daba. Así siguieron la visita de sus amigotes y yo en lo mismo. Sabes, poco a poco lejos de sacar el daño que me hacía me fue gustando sumirme en otro mundo con mi polvo blanco, me alejaba de las pesadillas físicas que tenía y me comenzó a gustar, hasta hoy que cuando me toca la medicina y no la tengo me dan depresiones que no son normales. Sé que debes de estar con la boca abierta pero me pediste que te contara lo que me pasaba.

YOYO DICE:

                  —Luego de una pausa de un minuto—Si, no sé qué decirte. Lo que más me asombra es, como lejos de huir te quedas al pie del caimán maldito ese, como te llevo al camino que él quería. Lily aun estas a tiempo, vete de ahí, lárgate de ese infierno agarra un avión.

LILY DICE:

                 Ya me advirtió que si me largo le tengo que pagar todos los viajes y paseos lindos que me pago, a cada ratico me lo recuerda, incluso la coca que me da. Y es verdad lo que dice, ya soy adicta como voy a estar sin dinero y quien me pagaría mí talquito cuando me haga falta consumir  ¿ah?

YOYO DICE:

                     Te entiendo de alguna manera pero, ¿no entiendes que te vas acabar la vida?  Yo insisto que la solución es que agarres un avión y te vayas cuanto antes de allí, luego yo mismo te llevo al médico, te ayudamos, te quitamos esa puta adicción. ¿Estás ahí? ¿Lily? —tardo otros diez minutos más.

LILY DICE:

                  Disculpa, busque un vaso de agua y fui al baño. También me sirvió para relajar algo.

YOYO DICE:

                  Qué bueno, creo que yo debería relajarme con algo también. lo necesito

LILY DICE:

                  Vaya usted, estaré esperándolo. Aquí al lado hay tremenda rumba, creo que no me dejaran dormir… —pasaron otros diez minutos más o menos.

YOYO DICE:

                     Ya estoy aquí. Dime algo y se sincera. ¿Cuándo fuiste al baño, ¿te metiste droga?

LILY DICE: 

                  Jajaja, tampoco así, como crees que cada vez que voy a mear tengo que drogarme jajaja, no, no.

YOYO DICE:

                   Que sientes cuando lo haces, cuéntame. ¿Es verdad que con esa cosa puedes beber alcohol sin que te haga daño alguno y duras toda una noche bebiendo?

LILY DICE:

                 Bueno eso depende de cuánto tomes o que bebas entiendes, pero si ayuda mucho a que no sientas tanto el efecto del alcohol, eso es cierto.

YOYO DICE:

                      Aja, pero ¿qué sensación sientes?

LILY DICE:

                 ¡Te acelera!  El corazón palpita rápido. Depende en cuanto a la reacción que tomes , por lo menos a mí, es mi estado de ánimo y lo que me rodea.  Es relativo como reacciones.

YOYO DICE:

                 ¿Y es verdad que tiene la persona alucinaciones?

LILY DICE:

                 ¡NO!, más bien es una paranoia que muchas veces ni se soporta. Aunque yo lo veo como que algo pasa y se manifiesta oculto y uno tiene o trata de responder a eso que está en las sombras…no sé si me entiendes.

YOYO DICE:

                   Más o menos Lily, voy entendiéndote. ¿Es cierto que los ojos se te hinchan y ponen rojos como tomates?

LILY DICE:

                  Si, los ojos se alteran mucho, pero es si te pasas de lo que debes consumir, de otra manera— no sé si es que no me he fijado en los míos— pero no creo se alteren mucho  jajaja. Yo sé que todo es una locura, pero así ha sido siempre mi vida desde que llegue.

YOYO DICE:

                    No lo pongo en duda con todo esto que me cuentas Lily…

LILY DICE:

                    Lo que tengo en cima es el infierno según san Pedro, san marcos y san pirindingo.

YOYO DICE:

                   Y como haces si vas a viajar, para controlar ya esa adicción, me imagino tendrás que llevarte algo.

LILY DICE:

                  Bueno depende también, además no soy una loca adicta como en las películas jajaja.

YOYO DICE:

                   Aja, ¿y de que depende?

LILY DICE:

                Bueno de los deseos que tenga de meterme un polvo, del estrés ,de algo, y de a donde vaya a viajar, porque no me gustaría que  en un revisado de la policía me  agarren droga encima y las personas que vayan conmigo vean todo eso, sería imperdonable para mi tal vergüenza.

YOYO DICE:

                  Claro, además de que pasarías un mal rato con la propia policía.

LILY DICE:

                 Esos hijos de la gran mierda, lo que hacen es pedir plata por el silencio. Pero si, tienes razón. No te imaginas el mal rato que pasaría. Por eso prefiero tener contactos a donde vaya y que me consigan talquito del bueno.

YOYO DICE:

                   Lily, ¿y qué tiempo te metes sin consumir, cuanto aguantas sin hacerlo?

LILY DICE:

                 Bueno ahorita, hasta tres días duro sin hacerlo, hace un mes o dos, pues todos los días…

YOYO DICE:

                 ¡Dios mío!  Aun tres días, una semana, un mes me parece mucho para que una persona se meta toda esa diablura hecha polvo.

LILY DICE:

                 Hecha polvo estoy yo amigo mío…pero bueno, es lo que me ha tocado vivir, y con cierto morbo lo estoy aceptando día a día…

YOYO DICE:

                  He ahí el grave error, el ver como algo normal una situación que es anormal. Tienes que salirte inmediatamente de ese mundo sea como sea y al costo que sea.

LILY DICE:

                El viento es así, normal y anormal. Cuando nos despeina y vuela el sombrero, ahí es anormal, cuando disfrutamos de un rico aire puro, es normal, pero nos mantiene vivos…

YOYO DICE:

                   Lily, no compares una cosa con la otra, no tienen nada que ver.

LILY DICE:

                  Si, si tienen que ver, porque así es mi vida, por mucho que me afecte, que sufra, es lo que me está tocando vivir y tengo que hacerme fuerte para sobre llevarlo, y sobrevivir.

YOYO DICE:

                     No sé a qué te refieres con sobrevivir, si por lo que me dices ya estas media muerta Lily…no sé qué decirte ya para que te ayudes tu misma, para que veas que hay mucha luz detrás de todas esas sombras que te acompañan.

LILY DICE:

                 Sabes, si voy a vivir como árbol, prefiero ser árbol de bosque, que uno en el medio del camino

YOYO DICE:

                 MMMM… no entiendo

LILY DICE:

                 Yo sí, y es mejor que dejemos todo esto aquí donde está, no te preocupes, que sea lo que Dios, o lo que sea, disponga con mi vida.  Chao.

YOYO DICE:

                   NO, NO TE VAYAS. No te abandones, hablemos un poco más.

LILY DICE:

                 Te dije que no quiero hablar más contigo de esto, ¿eres tarado o no entiendes?

YOYO DICE:                 

                    ¿Por qué me hablas así?

LILY DICE:

                  Ay ahora te pones sentimental, te voy a expulsar de todo esto, ¡Vete a la mierda!  Mongólico

                   Esta chica tranco todo tipo de comunicación posible, ni siquiera amigos de amigos palparon alguna especie de noticia. Actualmente no sé cuál sería su destino, pero sentí una gran responsabilidad de orar por esta muchacha y eso hago con frecuencia. Lo que pase, ya no está en nuestras manos, sino en algo más celestial y más divino. El destino de cada ser humano actúa como las huellas dactilares, no importa que te cortes los dedos, seguirán siendo tus huellas.

                                                                                                                                            YURI