Capítulo 40

2687 Palabras

La situación le resulta muy divertida a Zac quien no me quita los ojos de encima, mientras una de sus segura, múltiples amantes, se aferra a él, en busca de la ayuda que nunca llegará. Ya que, Zac no es de los que defiende, sino, de los que utiliza y desecha cuando ya no les interesa. Y es por ello que, le sonrió sabiendo lo que hará. — Entonces tú eres su marido, ¿no es así? — pregunto divertida a lo que él responde alejando a esa mujer de su cuerpo, para después caminar a mí y abrir la puerta mientras toma mi mano. — Luciana, si vas a delirar, hazlo fuera del trabajo y sin que yo esté relacionado a tus delirios. Además, no quiero que en algún momento se te ocurra golpear a mi esposa, o te esperara más más una demanda ¿me entiendes? — le pregunta molesto para después entrar conmigo a la

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR