Tener todos los contactos fue fundamental. Escribí una carta a mis antiguos miembros de la Manada, explicándoles lo que nos había pasado a mí y a sus Alfas, y lo que ocurriría con la disolución de la Manada. Terminé con esto: Los amo a todos y cada uno de ustedes, y lamento mucho que hayamos llegado a esto. Fue un honor servir, aunque sea brevemente, como su Alfa. Les deseo las bendiciones de Luna en sus nuevas Manadas y sus nuevos hogares. La Manada tuvo éxito en sus inversiones, así que tendrán suficiente dinero para seguir sus sueños. Envíenme un correo electrónico o una postal; me encantaría ver qué están haciendo. Por mi parte, tengo la intención de regresar a nuestro hogar y comenzar una nueva vida, esta vez como humana. Son mi única familia, así que manténganse en contacto. Siempre

