Estaba algo nervioso, en éstos momentos una policía, de la que no se su nombre me va hacer unas preguntas ¿Sobre qué? No sé, Tal vez quiera hablar sobre la carrera, solo espero que no esté enojada por el trabajo que les genere. Estaba en la sala de interrogatorios, esperando sentado en una mesa y frente a mí un vidrio en el que podía ver mí reflejo, sabía que me veían, sin embargo, no me molestaba, y aunque tenía nervios, no los demostré, estaba completamente calmado y sereno. - Hola Sam, soy la oficial Ana Rodríguez – dijo la policía, al tomar asiento. - Disculpé, no sé ni porqué me trajo. La carrera no era nada más que un simple juego. - Sí claro, un juego, te creo. - Enserio, no le miento, espere ¿Qué? – la miré confundido, era extraño que la policía demostrará confiar en un sospec

